Al menos cuatro personas fallecieron ayer -entre ellas un policía y dos soldados- y otras 14 resultaron heridas en dos ataques perpetrados en Irak, informaron fuentes del Ministerio del Interior.

Las fuentes explicaron que un puesto de control conjunto de la Policía y el Ejército iraquí fue atacado por un grupo de hombres armados no identificados en la zona de Abu Graib, 25 kilómetros al oeste de Bagdad.

En este incidente murieron dos militares y un policía, mientras que otro agente y otro soldado sufrieron heridas graves y fueron trasladados al hospital.

El otro suceso tuvo lugar en Mosul, capital de la provincia septentrional de Nínive, donde una explosión, que tenía como objetivo una patrulla de la Policía, y un ataque con granadas causó la muerte de un civil y heridas a otras doce personas.

Por otro lado, el portavoz del Plan de Seguridad para Bagdad, general Qasim Atta, anunció en una rueda de prensa la detención en una redada efectuada en el sur de la capital de varios miembros de Al Qaeda.