La cercanía del rescate de los 33 mineros que llevan más de dos meses atrapados a 700 metros de profundidad en el norte de Chile se concreta en una mezcla de euforia de familiares y hasta de algunas autoridades con la cautela de los expertos.
Euforia que llevó al ministro de Salud, Jaime Mañalich, a fijar el rescate para el martes, lo que fue matizado por su colega de Minería, Laurence Golborne y por André Sougarret, jefe de las maniobras de rescate. Con cautela, Golborne dio un plazo de 24 horas para que la máquina más adelantada, la T-130, "rompa" la galería donde están los mineros, es decir, haga contacto con ellos.
En las primeras horas de ayer, la T-130 estaba a 585 metros de profundidad, a menos de 50 de los 632 metros que debe excavar para contactar a los mineros. En ese punto, la máquina fue detenida para un cambio de martillos y según Golborne, debe reanudar su avance en las próximas horas.
"Esperamos romper dentro de las próximas 24 horas, la celeridad depende de la velocidad de cambio del martillo y velocidad de perforación; hay que llegar con menos velocidad al punto de ruptura", precisó. "Estimamos que va a ocurrir esta noche (madrugada de hoy en Canarias) o en la madrugada de mañana (la mañana de hoy), pero no tenemos una hora", subrayó.
Agregó que tras hacer contacto, se analizará el conducto para luego decidir su "encamisamiento" (revestimiento).
"En el caso que no se encamise, el plazo para iniciar el rescate sería de 3 días, pero se extendería a 8 días si es que se decide encamisar. Tenemos un equipo de geólogos para analizar esta materia, vamos a tomar la decisión cuando tengamos la ruptura ya efectuada", remarcó Golborne.
En Santiago, la portavoz de La Moneda, Ena Von Baer, dijo que "no podemos establecer el día exacto, pues depende de la situación con la cual los técnicos se hallen en el momento en que rompamos", dijo. "Ahí se verá si tenemos o no tenemos que encamisar, y por lo tanto, cuántos días nos podríamos demorar", añadió.
Pero las primeras palabras del ministro de Salud ya habían calado entre los familiares de los mineros, que reaccionaron con euforia y esperanza renovada.
"Es una muy buena noticia, ya que estábamos todos a la expectativa de que rompieran primero y después se diera la fecha del rescate. Me imagino que van a romper cuando llegue la esposa del presidente", dijo Lilianet Ramírez, esposa del minero Mario Gómez.
"Estoy muy feliz. No creí que fuera tan pronto. Supuestamente después del rompimiento se iban a demorar ocho días para sacarlos, pero si se adelantó estoy feliz", acotó Jéssica Yáñez, esposa de Esteban Rojas.
"Para mí que ya rompieron, ojalá sea así y tengan todo planeado para la próxima semana", opinó por su parte Wilson Ávalos, tío de dos atrapados, Renán y Florencio Ávalos, mientras Alberto Segovia, hermano de Darío, un poco más sereno, manifestó su esperanza de que "rompan hoy y después esperar el rescate más tranquilos".
Soporte sanitario
El propio ministro Mañalich matizó después sus palabras iniciales: "Estamos preparados para dar todo el soporte sanitario". "Si ocurre el martes 12, día del encuentro de dos culturas, o el día 13 ó 14, no lo sabemos, pero estamos preparados para recibirlos a partir del lunes por la noche", dijo.
"Durante los últimos días hemos sometido a los mineros a una intensidad física regulada, pero mucho más intensa. Esto es para dar respuesta a situaciones de estrés máximo, para emular posibles situaciones durante el rescate", agregó.
El presidente Sebastián Piñera anunció que su homólogo de Bolivia, Evo Morales, estará presente en el rescate, ya que uno de los atrapados, Carlos Mamani, es de esa nacionalidad.
"El presidente Evo nos ha llamado, porque él también quiere estar ese día", dijo Piñera durante un encuentro con mujeres empresarias, en el que también habló de "unos pocos días" para el rescate.
En tanto, Sougarret dijo que el Plan A, que ejecuta la máquina Strata 950, alcanzó en las últimas horas los 599, pero por un problema técnico está detenida unos cinco días, mientras el Plan C está a 409 metros de profundidad.