El activista mexicano Antonio Velázquez, uno de los portavoces del campamento de protesta instalado a las afueras de El Aaiún, ha afirmado que se vive una fuerte tensión desde la muerte del menor saharaui Elgarhi Nayem y ha advertido de que "en cualquier momento puede haber una tragedia" similar.

"Desde la muerte del chico se vive en estado de tensión, hay mucha inquietud", declaró este jueves Velázquez en conversación telefónica con Europa Press. Velázquez y la española Isabel Terraza son dos de los pocos extranjeros que se encuentran en estos momentos en el campamento, que alberga a alrededor de 20.000 saharauis, rodeados por el Ejército y las fuerzas policiales marroquíes.

Según Velázquez, los soldados marroquíes dispararon muy recientemente a las ruedas de un automóvil todoterreno Land Rover en el que viajaba una familia, incluido un bebé. "Los militares les siguieron y acribillaron los neumáticos", explicó. "A ellos no les pasó nada, pero en cualquier momento puede haber una nueva tragedia, y la gente lo sabe", dijo.

El activista declaró también que las fuerzas de seguridad marroquíes han puesto en marcha un fuerte dispositivo de vigilancia, tanto en la única carretera de acceso como a lo largo del muro de piedra levantado alrededor del campamento, para impedir la entrada de suministros y de saharauis.