El primer incidente serio de un "superjumbo", desde que estos aparatos realizaran sus primeros vuelos comerciales en 2005, ocurrió ayer cuando el A380 de Qantas aterrizó de emergencia en Singapur. El avión sufrió un fallo de motor después del despegue y durante el vuelo, según confirmó la compañía francesa Airbus, su fabricante, a partir de los informes preliminares.

Aunque la compañía aseguró en un comunicado que no resultó herido ninguno de los 440 pasajeros y las 26 personas de la tripulación que viajaban a bordo del aparato, que operaba el vuelo QF32 entre Singapur y Sidney, tanto Airbus como la aerolínea australiana suspendieron todos sus vuelos de sus seis "superjumbos" A380.

El avión, con matrícula VH-OQA, número 14, fue entregado a Qantas el 19 de septiembre de 2008 y había acumulado 8.165 horas de vuelo y 831 ciclos de vuelo hasta ayer. Qantas especificó que una vez detectado el fallo en el motor y en línea con los procedimientos establecidos, los pilotos decidieron su retorno a Singapur, donde el aparato aterrizó con toda seguridad a las 11.45 horas (hora local).

El aparato, impulsado por cuatro motores Rolls-Royce Trent 900, tuvo que regresar al aeropuerto de Singapur, de donde había despegado, tras detectar el fallo, aterrizando sin problemas y sin que se produjeran heridos entre las casi 500 personas que viajaban a bordo.

De acuerdo con el anexo 13 de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), Airbus proporcionará asistencia técnica completa a la BEA francesa, así como a las autoridades australianas, que se encargarán de la investigación del accidente.

La aerolínea, tras suspender todas sus operaciones a bordo de los seis A380 con que cuenta en su flota, asegura haber comenzado sus propias investigaciones para esclarecer el incidente. Los vuelos a bordo de la flota de A380 seguirán suspendidos hasta que se obtenga "suficiente información" sobre el incidente.

El consejero delegado de Qantas, Alan Joyce, señaló que los servicios a bordo del "superjumbo" no se reanudarán hasta que se compruebe que se cumplen los requerimientos de seguridad de la compañía.

La aerolínea Singapore Airlines también suspendió sus vuelos a bordo de su flota de A380 tras el incidente registrado en la aeronave de la australiana Qantas. La compañía informó de que tiene que hacer revisiones de los aparatos por recomendación del fabricante de los motores, Rolls Royce, y de la propia Airbus.