Los ministros europeos de Energía respaldaron hoy la propuesta de la Comisión Europea de autorizar sólo las extracciones de petróleo seguras en alta mar para prevenir accidentes como el causado por el vertido de la compañía BP en el golfo de México.

Los Veintisiete apoyaron la concesión de licencias de explotación sólo a operadores que previamente hayan demostrado "su capacidad técnica y financiera de hacer frente a accidentes", así como "su capacidad y compromiso de ejercer una gestión segura", según un texto de conclusiones aprobado hoy.

Recordaron, no obstante, que no conviene "descalificar a operadores que sean técnicamente competentes aunque tengan capacidades financieras limitadas" y pidieron ajustar "los instrumentos y requisitos de garantía financiera a este respecto".

Los ministros se declararon "profundamente preocupados" por la catástrofe del golfo de México y consideraron de "interés vital para Europa adoptar todas las medidas posibles para prevenir desastres similares".

Todo ello sin perder de vista, por un lado, que la producción de petróleo y gas en la UE, que en su mayor parte se efectúa en alta mar, contribuye a reducir la dependencia energética del exterior y favorece la creación de empleo; y por otro, su impacto medioambiental.

En materia de responsabilidades, los países coinciden con Bruselas en que son las compañías las que deben asegurar la seguridad de sus actividades y hacer frente a los costes de limpieza, así como de las medidas reparadoras y las compensaciones que sean necesarias, en virtud del principio "quien contamina paga".

En opinión de los socios comunitarios, la legislación existente en la UE ya es efectiva y garantiza la protección medio ambiental, pero "podría resultar útil modificar o complementar determinados ámbitos legislativos para dar coherencia al marco legislativo y asegurar la aplicación de las prácticas más avanzadas".

En este contexto, los países invitan al Ejecutivo comunitario a que presente iniciativas concretas en 2011, lo antes posible.

Asimismo, apoyan que se utilicen al máximo los instrumentos de emergencia ya existentes y se creen procedimientos nuevos y defienden el establecimiento de regímenes nacionales de inspección que aseguren el cumplimiento efectivo de todos los requisitos de seguridad.

El comisario europeo de Energía, Günther Oettigner, presentó el pasado 13 de octubre una comunicación en este sentido que fue considerada poco ambiciosa por las organizaciones ecologistas.

Oettinger se había mostrado en un principio a favor de detener las perforaciones en alta mar hasta que se aclarase lo ocurrido en el golfo de México, pero posteriormente precisó que sólo se refería a las perforaciones nuevas que no cumpliesen los requisitos mínimos de seguridad.

"La moratoria para las plataformas que ya están en activo no es viable", afirmó el comisario, quien sólo hizo referencia en su propuesta al "bloqueo temporal de las autorizaciones", en sustitución del término "moratoria".

Después del visto bueno de hoy en el Consejo, las recomendaciones de Bruselas serán estudiadas en el Parlamento Europeo y podrían convertirse en medidas de carácter legislativo la próxima primavera.