El Gobierno chino criticó las maniobras militares llevadas a cabo hoy por Corea del Sur en el mar Amarillo, a pesar de las amenazas de Corea del Norte, y dijo que "nadie tiene derecho a incitar o provocar el conflicto o la guerra".

Así lo manifestó hoy el viceministro de Asuntos Exteriores de China, Cui Tiankai, que reiteró que la postura de Pekín siempre ha sido apostar por el diálogo y las negociaciones entre las dos Coreas.

"Nadie tiene el derecho de hacer que los pueblos de los dos lados de la península coreana viertan su sangre", declaró Cui.

Corea del Sur inició y concluyó hoy sus maniobras militares con fuego real en la tensa frontera del mar Amarillo tras una hora y media de operaciones, relató la agencia surcoreana Yonhap.

La localización de las maniobras, ante la isla surcoreana de Yeonpyeong que fue atacada el mes pasado por el régimen norcoreano con rondas de artillería que mataron a cuatro personas, causó la alarma generalizada, aunque los ejercicios se desarrollaron sin que los medios locales hayan informado de incidentes.

Pekín es el máximo aliado político y económico de Pyongyang y aboga por la reanudación de las conversaciones a seis partes (en las que participan las dos Coreas, Rusia, Japón, Estados Unidos y la propia China) para negociar la paz en la región.

El Consejo de Seguridad de la ONU se reunió en Nueva York este domingo para tratar de rebajar la tensión en la península coreana, aunque finalmente no llegó a un acuerdo ante la divergencia de opiniones entre sus miembros, ya que China y Rusia se resistieron a condenar a Corea del Norte.