Seif el Islam, hijo del líder libio, Muamar el Gadafi, afirmó ayer que la situación en Libia es "excelente" en las tres cuartas partes de su territorio, aunque aceptó que existe "una voluntad interior de cambio" en el país, al tiempo que anunció "reformas" en todos los niveles de la administración.

En una entrevista con la cadena emiratí Al Arabiya, Seif el Islam Gadafi reconoció igualmente que han existido "errores en la gestión de la crisis" y aseguró que "hace falta una negociación amistosa para hacer una nueva Libia".

"No hay futuro para los libios al margen de la reconciliación, ya que hay que construir la Libia de mañana", señaló quien, hasta antes de la rebelión que sacude el país desde hace diez días, era considerado el más probable sucesor de Gadafi al frente del poder. Asimismo, anunció "cambios en todas las esferas" de la administración.

Entre tanto, representantes del poder civil y militar del este de Libia, controlado por comités populares tras el levantamiento del pasado 17 de febrero, mostraron ayer su confianza en que Muamar el Gadafi abandone pronto el poder. Fathi Tarbul, miembro del gobierno provisional de Bangasi, la segunda ciudad del país, aseguró que "Gadafi sólo tiene bajo control un 15%" del país. Por ello, aseveró que "está viviendo los últimos momentos y esperamos el final de su régimen en los próximos días".

Por su parte, el jefe de las fuerzas armadas de la zona este, el general de brigada Abdul Nafa Musa, se mostró convencido de que "la gente liberará Trípoli", así como que todos los oficiales de la parte oriental del país están ya contra el régimen. A su vez, instó al resto de oficiales del país a "marchar hacia Trípoli" y sublevarse contra el régimen de Muamar el Gadafi. Sin embargo, descartó, "por el momento", que los sublevados en la "zona liberada" emprendan "una acción militar hacia la capital".

El Consejo de Seguridad de la ONU se reunió ayer de urgencia para debatir las posibles sanciones a imponer al dictador libio y su entorno por la brutal represión en las protestas de civiles.

Entre las opciones que adoptará el máximo órgano de decisión de Naciones Unidas se baraja desde la congelación de bienes y la prohibición de viajar a Gadafi y su entorno al embargo de armas, entre otros. Los Quince países miembros del Consejo estudian un proyecto de resolución, elaborado por Francia y Reino Unido, en el que además se aborda el problema de la asistencia humanitaria, uno de los que más preocupa a la ONU.

Mientras, el primer ministro británico, David Cameron, ha tratado telefónicamente con sus colegas de Alemania, Italia y Turquía sobre una eventual acción coordinada para rescatar a los ciudadanos de esos países atrapados en Libia. Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores español confirmó ayer que sólo quedan cinco españoles en Libia por evacuar y prevé hacerlo en breve.

A su vez, el presidente de EEUU, Barack Obama, aseguró en una conversación telefónica con la canciller de Alemania, Ángela Merkel, que Gadafi "debe hacer lo que es correcto para su país marchándose ahora", según informó la Casa Blanca.