El presidente de EEUU afirmó ayer que el líder libio, Muamar el Gadafi, "está en el lado equivocado de la Historia", y exigió su salida inmediata del poder. En una rueda de prensa, Obama no descartó la imposición de una zona de exclusión aérea sobre Libia, e insistió en que su Gobierno maneja "una amplia gama de opciones".

No obstante, declaró que "lo que queremos es tener la capacidad de intervenir potencialmente rápido si la situación se deteriorara". La gran prioridad ahora mismo, afirmó, es la ayuda humanitaria.

Para ello, Obama autorizó el uso de aviones militares estadounidenses para que repatríen a ciudadanos egipcios que han salido de Libia por la frontera tunecina, y el uso de aviones civiles para el traslado de otros refugiados.

"Voy a ser muy poco ambiguo sobre esto. El coronel Gadafi tiene que dejar el poder y marcharse", dijo Obama, una petición que repitió en tres ocasiones en menos de diez minutos. De otro modo, dijo, existe "el riesgo de un punto muerto que con el tiempo pueda convertirse en algo sangriento".

Una posibilidad que se considera es que Gadafi se atrinchere en Trípoli mientras su pueblo padece escasez de alimentos, por lo que es necesario que la comunidad internacional estudie alternativas para su suministro.

Obama hizo estas declaraciones un días después de que su secretario de Defensa, Robert Gates, pareciera descartar una zona de exclusión aérea al considerar que requeriría eliminar las defensas antiaéreas libias y equivaldría a un acto hostil.

Por otra parte, Said el Islam Gadafi, hijo del líder libio, rechazó ayer la propuesta del presidente venezolano, Hugo Chávez, de establecer una mediación internacional para ayudar a solucionar el conflicto que vive el país.

El hijo de Gadafi manifestó no estar al tanto de la propuesta venezolana, pero descartó con contundencia una eventual mediación internacional. "No sé nada sobre esto. Es como si yo fuera a propiciar un acuerdo en el Amazonas", dijo.

Los venezolanos, afirmó, "son nuestros amigos y les respetamos y nos gustan, pero están lejos y no tienen ni idea".

"Libia está en Oriente Próximo y en el norte de África, y Venezuela está en América Latina. Gracias, lo agradecemos. Son nuestros amigos. Es un buen gesto, pero so-mos capaces de resolver nuestros problemas. No hay necesidad de una intervención extranjera", dijo.