Los jefes o representantes de 61 tribus libias expresaron en un texto difundido hoy su voluntad de construir "una Libia libre, democrática y unida", una vez que "el dictador Muamar el Gadafi se haya ido".

En una declaración dada a conocer por el escritor francés Bernard-Henry Lévy, y que se firmó el pasado 12 de abril en Bengasi y fue respaldada en un primer momento por representantes de 32 tribus, para contar posteriormente, según Bernard-Henry Lévy, con el apoyo de "todas las tribus de Libia".

"Ante las amenazas que pesan sobre la unidad de nuestro país, ante las maniobras y la propaganda del dictador y de su familia, declaramos solemnemente esto. Nada podrá dividirnos. Compartimos el mismo ideal de una Libia libre, democrática y unida", subrayan en los representantes de las tribus.

En esa declaración consideran que es "el dictador quien, intentando enfrentar a las tribus de Libia, dividía el país para reinar mejor", y destacan que "no hay nada cierto en el mito que él ha alimentado de una oposición ancestral y de una fractura actual" entre dichas tribus.

"La Libia de mañana, cuando el dictador se haya ido, será una Libia unida, cuya capital será Trípoli y donde seremos por fin libres de formar una sociedad civil según nuestros valores", indican los 61 signatarios.

Su mensaje subraya que ha sido confiado "a un filósofo francés para agradecer a Francia, y a través de ella a Europa", su intervención para "impedir la masacre que nos había prometido Gadafi", y el hecho de poder construir "gracias a ellas la Libia libre y unida del mañana".

Mientras tanto, la situación en la ciudad libia de Misrata va "de mal en peor" y la Comisión Europea ha alertado hoy de que la situación humanitaria ha empeorado, según avisó la comisaria responsable de Cooperación Internacional y Ayuda Humanitaria, Kristalina Georgieva.

"El bombardeo del puerto de Misrata durante la jornada precedente ha hecho que la situación humanitaria vaya de mal en peor. Estoy muy preocupada por la posibilidad de que los duros combates rompan el frágil salvavidas que las organizaciones humanitarias han logrado establecer a través del puerto de Misrata", alertó la comisaria.

Georgieva pidió a todas las partes implicadas en el conflicto que finalicen "con urgencia" los bombardeos del puerto de la ciudad y los combates en áreas de población civil para "permitir la reanudación de las operaciones humanitarias" y "proteger" a la gente.

Según la comisaria, el bombardeo del puerto ha paralizado el envío de alimentos, medicinas y otros artículos de ayuda humanitaria, pero también ha hecho "casi imposible" la evacuación de heridos por mar, por lo que los hospitales están "sobrepasados por un número creciente de heridos".

Por último, la comisaria recuerda que la Comisión Europea ya ha movilizado unos 100 millones de euros de ayuda humanitaria para socorrer a Libia y está "preparada para hacer más", pero para ello necesita tener acceso a la población.

Asimismo, el ministro de Asuntos Exteriores de Italia, Franco Frattini, dijo que el arsenal militar del líder libio Muamar el Gadafi se ha reducido en más de un tercio gracias a las operaciones de la coalición aliada internacional, ahora bajo mando de la OTAN.

En una comparecencia ante las Comisiones de Defensa y Asuntos Exteriores del Parlamento italiano, en Roma, Frattini justificó la decisión de su Ejecutivo de sumarse a los bombardeos de los aliados, una iniciativa a la que se oponen sus socios de Gobierno de la Liga Norte (LN).

Según dijo el ministro de Exteriores, el arsenal militar de Gadafi "se ha reducido en más de un tercio" como consecuencia de la intervención aliada, que ha "desmantelado la aeronáutica militar" del líder libio.