La canciller alemana, Angela Merkel, recalcó ayer que en la UE se ofrece solidaridad a cambio de condiciones, por lo que países como Grecia deben implementar severas reformas para obtener la ayuda financiera comunitaria. En un encuentro con medios extranjeros, la jefa del Gobierno alemán subrayó que la solidaridad alemana con Grecia "nunca ha estado a debate", aunque recalcó que su Gobierno exige a cambio a Atenas un proceso de reformas "valiente" y "difícil".

Angela Merkel no quiso valorar abiertamente la actual situación financiera griega, pese a los insistentes rumores sobre una posible reestructuración de la deuda o incluso un nuevo rescate, hasta que la misión que se encuentra actualmente analizando la situación en Atenas concluya sus trabajos a finales de esta semana.

"Espero a que la misión en Grecia termine su análisis a final de semana. No me pronunciaré hasta que conozca los resultados", afirmó la canciller, que consideró que en la actualidad la UE se enfrenta a "retos extremos".

A continuación, apeló a su "responsabilidad política" y agregó que no se hace "ningún favor" a Grecia y a Europa "especulando" sobre la situación financiera helena antes de conocer el informe conjunto que elaboran en la actualidad la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Pasos difíciles

Merkel subrayó asimismo que en los últimos doce meses Atenas ha dado pasos "difíciles" y "valientes" en la dirección adecuada y que, por tanto, Grecia "no se encuentra en la misma situación que hace un año", cuando se aprobó de urgencia su rescate, a pesar de las informaciones aparecidas en los últimos días.

No obstante, argumentó que el proceso heleno de consolidación fiscal y salida de la crisis económica "no dura sólo unos meses".

La canciller señaló que Alemania está preparada para asistir a Grecia o a cualquier otro país en dificultades, pero recordó que todo rescate financiero debe ir condicionado a la aplicación de un programa de reformas económicas estrictas encaminadas a implantar una "cultura de la estabilidad".

Respecto a la situación financiera de España, Merkel valoró las reformas que ha aplicado el Gobierno para atajar la crisis y destacó el "consenso" social en el que se han generado, por el apoyo de los sindicatos y la patronal.