Los tres militares que resultaron ayer heridos en el ataque ocurrido en la provincia afgana de Badghis, en el que murieron un sargento y una soldado, evolucionan favorablemente y viajarán "pronto" a España para terminar de recuperarse de sus heridas.

Así lo ha explicado esta mañana la ministra de Defensa, Carme Chacón, tras visitarlos en el hospital de campaña Role 2 de Herat en el que se encuentran. La ministra ha viajado la pasada madrugada a Afganistán para conocer toda la información sobre el ataque y coordinar la repatriación de los fallecidos.

En una rueda de prensa ayer domingo en la sede del Ministerio, Chacón dio detalles sobre las heridas que sufrieron los tres militares: el cabo Roi Villa Souto tuvo una fractura de tibia y peroné de la pierna derecha; el soldado Jhony Herrera Trejos, fracturas en la tibia y húmero derechos; y el soldado Rubén Velázquez Herrera sufrió contusiones múltiples y heridas leves.

En su visita al contingente español en Herat, Chacón ha alentado a las tropas para que sigan trabajando con el "mismo valor, honor y nobleza" durante los tres años que quedan de misión y les ha felicitado por ser los militares "más duros, más valerosos" y los "más profesionales" a la hora de llevar a cabo esta misión.

Los militares españoles se han despedido de sus compañeros fallecidos en un breve funeral, antes de que los féretros fueran introducidos en el Airbus 310 de la Fuerza Aérea Española que les repatriará a España y cuya llegada a la base aérea de Gando (Gran Canaria) está prevista a las 18.00 horas (hora insular). Mañana se celebrará el funeral, que estará presidido por la ministra de Defensa, en la base militar General Alemán Ramírez, en el barrio de La Isleta de Las Palmas de Gran Canaria.