El Gobierno de Japón aprobó hoy una ayuda de más de 8.300 millones de euros para que Tokyo Electric Power (TEPCO) pueda indemnizar a los damnificados por el accidente en su central de Fukushima, que ha causado a la eléctrica unas pérdidas de más de 5.800 millones de euros entre abril y septiembre.

La ayuda, que supone un balón de oxígeno para la asfixiada compañía, se otorgará en forma de bonos gubernamentales que TEPCO podrá hacer efectivos para compensar a los miles de afectados por la crisis nuclear.

La radiactividad mantiene evacuadas más de 80.000 personas en un radio de 20 kilómetros de la central, un área que ha sido declarada zona de exclusión, y ha causado pérdidas millonarias en la industria agrícola, ganadera y pesquera de Fukushima.

Durante este año fiscal, que concluye en marzo de 2012, TEPCO tendrá que desembolsar cerca de 1 billón de yenes (unos 9.280 millones de euros) en indemnizaciones, y la cantidad podría aumentar a 4,5 billones de yenes (41.740 millones de euros) en los próximos dos años, según un panel gubernamental.

El Gobierno decidió ayudar a TEPCO con dinero de las arcas públicas después de que la empresa aceptara reducir en 2,5 billones de yenes (23.189 millones de euros) sus gastos de aquí a los próximos 10 años, tal como le sugirió el mes pasado una comisión oficial.

En ese plan de recorte se incluye una rebaja de las pensiones de sus empleados, además de una reducción de los costes de adquisición de material y la supresión de 7.400 puestos de trabajo.

La ayuda aprobada hoy garantiza a TEPCO, que abastece a unos 30 millones de personas en la zona de Tokio, la supervivencia hasta final de este año fiscal, que espera cerrar con una pérdida de 600.000 millones de yenes (5.565 millones de euros), según datos difundidos hoy.

El año fiscal anterior, que terminó el pasado 31 de marzo, el grupo perdió 1,25 billones de yenes (11.588 millones de euros) principalmente por el accidente en Fukushima, que se produjo menos de tres semanas antes de que se cerrara el ejercicio contable.

La que era la mayor eléctrica de Asia anunció hoy que en los seis meses posteriores al accidente, entre abril y septiembre, su pérdida neta ha sido de 627.200 millones de yenes (5.814 millones de euros), frente al beneficio de 2.200 millones de yenes (854 millones de euros) del mismo periodo de 2010.

También el resultado operativo del grupo se ha visto golpeado por el peor accidente nuclear de los últimos 25 años, reflejado en una pérdida operativa de 60.600 millones de yenes (562 millones de euros), frente a la ganancia de 201.300 millones de yenes (1.866 millones de euros) de un año antes.

La difusión de resultados de la eléctrica estuvo hoy acompañada de una evaluación de la situación en la maltrecha central de Fukushima Daiichi, donde los operarios luchan todavía para reducir los índices de radiactividad y estabilizar los reactores dañados.

Tanto TEPCO como el Gobierno nipón indicaron el mes pasado que esperan llevar los reactores a "parada fría", por debajo de los 100 grados centígrados, antes de que concluya el año.

El primer ministro japonés, Yoshihiko Noda, recordó a TEPCO que la ayuda aprobada hoy por el Gobierno proviene del bolsillo ciudadano y le instó a volcarse en las compensaciones a los afectados.

Se prevé que, además de los costes de las indemnizaciones, TEPCO tenga que desembolsar en un futuro cerca de 1,15 billones de yenes (10.660 millones de euros) para desmantelar los reactores, a lo que se sumarán al menos 225.000 millones de yenes (más de 2.000 millones de euros) en la descontaminación de las zonas afectadas.