El nuevo primer ministro griego, Lukás Papadimos, declaró hoy en el Parlamento que cada voto a favor del nuevo Gobierno de unidad nacional servirá para que Grecia se aleje del peligro de salir del euro.

"Cada uno de los votos a favor es equivalente a una decisión responsable para que no esté en peligro la permanencia de Grecia en la zona el euro y para el progreso de la economía", dijo Papadimos antes de que la cámara someta a un voto de confianza al nuevo gabinete.

Los problemas empeorarán si Grecia no participa en la zona del euro", afirmó Papadimos al tratar sobre las consecuencias en sueldos y pensiones de una eventual salida de la divisa única.

"Con el voto a favor, el nuevo Gobierno asumirá una tarea titánica que requiere de sangre fría", afirmó el nuevo jefe del Ejecutivo, resultante de un acuerdo entre los dos partidos mayoritarios, el socialista Pasok y el conservador Nueva Democracia, además del ultraderechista LAOS.

Y añadió que "la forma de afrontar la situación requiere de la verdad y de la recuperación de la confianza" hacia Grecia.

"Me siento optimista sobre que la zona del euro superará las dificultades actuales", recalcó.

Además aseguró que los esfuerzos para enderezar la maltrecha economía helena deben ser repartidos de forma justa entre todos.

"El coste del ajuste a la convergencia económica de Grecia y de las medidas sobre el pueblo griego deben de ser repartidos de forma justa", indicó.

El mandato del nuevo Gobierno se limita a ratificar el segundo rescate acordado con la eurozona por valor de 130.000 millones de euros -además de la quita del 50 % de la deuda privada- y lograr liberar los 8.000 millones de euros pendientes de pago del primer paquete de ayuda antes del 15 de diciembre.

Para lograr este objetivo el nuevo Gobierno debe ratificar las impopulares medidas exigidas por la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) antes de que los prestamistas liberen los recursos que eviten la suspensión de pagos.