Los integrantes del movimiento Ocupa Wall Street desafiaron ayer a las autoridades de Nueva York al tratar de entrar de nuevo, bajo el amparo de una orden judicial, a la céntrica plaza de Manhattan, de donde fueron desalojados la madrugada del domingo, y al tratar de ocupar otro parque de la Gran Manzana.

Centenares de manifestantes se agolparon ante la plaza Zuccotti, donde intentaron acceder gracias a una orden judicial que permite a los indignados volver a acampar en el lugar, mientras que otra parte del movimiento respondió al desalojo ocupando un parque más al norte de la ciudad, donde hubo nuevas detenciones.

"Nuestra idea es que, si el tribunal no nos permite volver a acampar en la plaza, nos instalemos en algún otro lugar y continuaremos la batalla legal por volver a Zuccotti, así como a través de sentadas y manifestaciones pacíficas", precisó Mark Bray, uno de los portavoces del movimiento.

Bray detalló que la respuesta del colectivo al desalojo de su campamento dictado personalmente por el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, llegó hasta los tribunales, donde la jueza Lucy Billings emitió una orden que prohibía la evacuación forzosa del lugar y permitía acampar a los manifestantes.