Agentes de la Guardia de Finanzas italiana (Policía fiscal y de fronteras) registraron ayer las oficinas de la agencia de calificación de riesgos Standard & Poor''s (S&P) de Milán, en el marco de una investigación que sobre esta agencia realiza la Fiscalía de Trani, sur de Italia. El abogado Giuseppe Fornari, que representa a la agencia estadounidense en Italia, confirmó a los medios locales el registro, precisando que "solo sabía" que se enmarca en las investigaciones que realiza la Fiscalía de Trani.

Según los medios locales, catorce personas fueron interrogadas por la policía fiscal.

La fiscalía de Trani investiga a las agencias Moody''s y S&P por supuestos delitos de especulación abusiva, manipulación de mercado y uso ilícito de información privilegiada.

Ya el 4 de agosto, la Policía fiscal italiana se incautó de varios documentos pertenecientes a las dos agencias de calificación de riesgos. Los documentos fueron confiscados durante un registro en las oficinas de sendas agencias similar al de ayer y se sumaron a la información recabada con la colaboración de las autoridades de la Comisión Nacional del Mercado de Valores de Italia (CNMV).

La Fiscalía de Trani abrió una investigación ante las turbulencias bursátiles registradas en la Bolsa de Milán y en los mercados de deuda de Italia entre 2010 y 2011.

Investigaciones

En Trani se llevan a cabo dos procedimientos de investigación paralelos: un primero abierto en enero de 2011 y que afecta a Moody''s por el informe difundido el 6 de mayo de 2010 en el que se afirmaba, con los mercados abiertos, que el sistema bancario italiano estaba entre aquellos en riesgo ante los problemas financieros de Grecia.

Y un segundo, abierto a mediados de 2011, sobre las valoraciones expresadas por S&P en tres ocasiones diferentes, una de las cuales planteaba dudas en julio de 2011 sobre el plan de ajuste presupuestario del Gobierno italiano antes de que este fuera al Parlamento y con los mercados también abiertos.

Las otras dos ocasiones corresponden a sendos informes divulgados en mayo de 2011 en los que S&P ponía en perspectiva negativa la deuda de Italia y de varios bancos italianos.

"S&P cambió la perspectiva sobre la deuda pública de positiva a negativa provocando la inmediata reacción del ministro de Economía, que difundió un comunicado diciendo que esa valoración no era verdadera", dijo en agosto de 2011 el fiscal del caso, Carlo Maria Capristo.