El número de víctimas mortales en los enfrentamientos entre la policía y los manifestantes en las ciudades egipcias de El Cairo y Suez asciende ya a doce, desde el comienzo de los disturbios la noche del jueves, informó hoy un responsable del Ministerio de Sanidad.

El subsecretario de ese departamento, Hisham Shiha, aseguró que siete de los muertos fallecieron en los choques registrados en El Cairo, mientras que otros cinco perdieron la vida en enfrentamientos similares en Suez, al este de la capital.

En ese saldo de víctimas está incluido también el teniente del ejército que murió ayer atropellado por un vehículo de la policía junto al Ministerio del Interior, donde todavía hoy continúan los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y manifestantes, muchos de ellos hinchas del equipo de fútbol Al Ahly.

Esta nueva ola de violencia en Egipto estalló después de la tragedia del pasado miércoles en el estadio de Port Said (noreste), cuando más de 70 personas murieron en una salvaje batalla entre seguidores del Ahly cairota y del equipo local, Al Masry.

Aficionados de ambos clubes y los partidos presentes en el Parlamento egipcio acusan de la tragedia a la negligencia de las fuerzas policiales desplegadas en el estadio, que no hicieron nada por impedir la masacre.