Los problemas en las infraestructuras y las redes de transporte se multiplican en Europa como consecuencia del temporal de frío y nieve que desde hace nueve días no da tregua en el continente, mientras sigue incrementándose el número de muertos, que ya superan de largo los 250.

Tan solo en los tres países más golpeados por la ola de frío, Ucrania, Polonia y Rumanía, se informó ayer de al menos 23 nuevos fallecimientos, en su mayoría personas sin hogar, con lo que los muertos ascienden ya, respectivamente, a 131, 53 y 34, respectivamente.

Las autoridades mantienen sus respectivos dispositivos de ayuda y en los tres países se han establecido millares de centros de acogida en los que los ciudadanos pueden refugiarse del frío.

Las fuertes nevadas que azotan Europa desde el pasado 27 de enero están causando además graves contratiempos en las carreteras, en el transporte aéreo y el ferroviario, así como en el suministro energético.

Al igual que otras repúblicas de la antigua Yugoslavia, Bosnia-Herzegovina está paralizada desde el viernes, y en la capital Sarajevo la nieve supera el metro de espesor y las temperaturas, siguen rondando los 15 grados centígrados bajo cero.

En la madrugada de ayer fueron rescatados a cien kilómetros de Sarajevo los integrantes del equipo de baloncesto del club serbio "Hemofarm", cuyo autocar había estado bloqueado durante 30 horas en un túnel a causa de la acumulación de nieve.

En Francia, son ya 75 los departamentos en alerta, y las autoridades de la región de París, donde han caído las primeras nevadas, han recomendado no utilizar el coche hasta que las máquinas quitanieves hayan despejado calles y carreteras.

En Italia se han producido ya 18 muertes por la ola de frío, y las nevadas han provocado cortes de tráfico y han dejado sin luz al menos 80.000 familias en el centro y sur del país.

El Reino Unido ha sido el país de Europa occidental que más cancelaciones de vuelos vivió ayer.

Ante unas previsiones meteorológicas que anunciaban para este domingo fuertes nevadas, el aeropuerto londinense de Heathrow decidió ya el sábado cancelar un tercio de los vuelos previstos para ayer.