Al menos 93 personas murieron ayer en el bastión opositor sirio de Homs, blanco de bombardeos y de una sangrienta ofensiva lanzada por las fuerzas del régimen de Bachar al Asad, según un grupo de la oposición. Los Comités de Coordinación Local (CCL), que citan a médicos y activistas sobre el terreno, informaron en un comunicado de que los continuos bombardeos han derruido varias viviendas en cuyo interior se encontraban sus residentes.

El hostigamiento con proyectiles de mortero es constante en los barrios de Bab Amro, Al Jalidiya y Al Bayada de Homs, siendo el primero el más castigado en esta jornada.

Uno de los activistas de los CCL que se encuentra en Bab Amro, identificado como Salim al Homsi, dijo que al menos cuarenta personas murieron en ese barrio. Ese saldo es provisional, según Al Homsi, debido a la cantidad de cuerpos que aún están atrapados bajo los escombros de las casas destruidas.

"La situación es trágica. Los bombardeos afectan de manera indiscriminada a las viviendas de civiles", lamentó Homsi.

El opositor explicó que los heridos son atendidos en las mismas casas o en las mezquitas, tras ser bombardeados los hospitales de campaña, en una ofensiva que comenzó el pasado viernes y ha dejado centenares de muertos.

Asimismo, denunció la escasez de material sanitario e hizo un llamamiento a las organizaciones internacionales para que ayuden.

Misión de la Liga Árabe

Por otra parte, La Liga Árabe estudiará mañana la posibilidad de formar una misión de observadores conjunta con la ONU para que compruebe sobre el terreno la situación en Siria, informó ayer un responsable del organismo.

En declaraciones a la prensa, el subsecretario general de la organización panárabe, Ahmed ben Heli, explicó que los jefes de la diplomacia árabe tienen previsto discutir el asunto y adoptar una decisión durante el citado encuentro.

A este respecto, el responsable volvió a recordar que uno de los motivos de la suspensión del trabajo de los observadores árabes enviados el pasado año a Siria fue la necesidad de "reforzar la misión en número de efectivos y equipamiento". Otra de las razones era la opción de recurrir a la experiencia de la ONU en este tipo de misiones, destacó.

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, confirmó el miércoles que responsables de la Liga Árabe habían pedido "ayuda a Naciones Unidas"