El recuento de votos de los comicios legislativos celebrados ayer en Irán comenzó esta madrugada tras el cierre a las once de anoche hora local (19.30 GMT) de los colegios electorales, que debido a la afluencia de votantes vieron ampliado cinco horas su horario, informaron hoy los medios locales.

Según estos medios, hasta las nueve de la noche (17.30 GMT), había votado en torno a un 64,6 por ciento de los 48,2 millones de votantes convocados a las urnas para elegir un Parlamento consultivo de 290 escaños, en unas elecciones en las que los reformistas fueron marginados y muchos de ellos están encarcelados.

El director del Comité Electoral de Irán, Seyed Solat Mortazavi, manifestó que los resultados se anunciarán entre las 48 y las 72 horas de iniciado el escrutinio.

Durante la jornada de votación de ayer, en varios lugares del país se acabaron las papeletas y hubo que reponerlas, entre ellos en algunos distritos cercanos a la ciudad noroccidental de Tabriz y en el noreste de Teherán, informó el Ministerio del Interior.

La ampliación del horario de votación, explicó el Ministerio del Interior en su página web, se debió a la gran presencia de electores en los colegios a la hora del cierre.

Tras finalizar la jornada electoral, el ministro del Interior, Mostafa Mohamad Nayar, aseguró que la jornada había transcurrido en calma y destacó que no se habían registrado incidentes.

Nayar puso de relieve que "la participación masiva del pueblo iraní muestra una vez más su nivel cultural y su compromiso con la ley", según señaló hoy la emisora de televisión iraní por satélite en español HispanTV.

Un total de 467 candidatos, de los 5.382 aspirantes que se inscribieron en un principio, recibieron la aprobación del Consejo de Guardianes de la Revolución, según informó Abas Ali Kadjodai, portavoz del organismo religioso, que supervisa la vida política de Irán y también las elecciones.

Las elecciones de ayer fueron las novenas legislativas en los 33 años de historia de la República Islámica, instaurada por el ayatolá Ruhola Jomeini tras derrocar en la Revolución de 1979 la monarquía del sha Mohamed Reza Pahlevi.

El Movimiento Verde, organizado tras las denuncias de fraude en las presidenciales de 2009, que ganó oficialmente Mahmud Ahmadineyad, promovió el boicot a estos comicios, mientras que sus líderes, Mehdi Karrubí y Mir Husein Musaví, llevan más de un año en un rígido arresto domiciliario, prácticamente incomunicados.

Otros reformistas, como el ex presidente Mohamed Jatamí, marginado de la política, no han promovido el boicot, pero han considerado que no se daban las circunstancias para presentarse.