Un sismo de 6,8 grados sacudió el pasado domingo a más de 1.300 kilómetros de territorio chileno dejando un total de 14 heridos y centenares de evacuados, según informaron ayer los expertos y los cuerpos de emergencia.

Además, el movimiento se considera una réplica "tardía" del terremoto de 8,8 grados que devastó varias regiones del país en 2010.

Miguel Ortiz, jefe de Alerta Temprana de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), confirmó que once de los heridos son de la región del Maule, dos de Santiago y uno del Biobío.

Del mismo modo, se asocia al temblor la muerte en la región del Maule, de José Roberto Rebolledo, a quien le sobrevino un infarto cardíaco en el momento del sismo.

En esa región, 289 personas permanecían ayer en lugares de seguridad, tras ser evacuadas de sus hogares en las localidades costeras de Constitución, Duao, Iloca, La Pesca y La Panimávida.

Según Ortiz, tras el sismo fueron evacuadas 24.283 personas, 14.320 de ellas en la región del Bíobío, 9.360 en Maule y 400 en la región de O''Higgins.

Cinco años

A su vez, recordó que desde la catástrofe de febrero de 2010, que causó 524 muertos, 800.000 damnificados y daños por 30.000 millones de dólares en seis regiones de Chile, los expertos han advertido de que sus réplicas podrían extenderse hasta por cinco años. Sobre la base de que el sismo de las 19:38 horas del domingo (22:38 GMT), que fue seguido por más de 20 réplicas, se localizó en la misma falla geológica que el terremoto de 2010 (bajo el lecho marino, a unos 360 kilómetros al suroeste de Santiago), los expertos defendieron que es una réplica del acaecido hace dos años.

El Instituto Sismológico de la Universidad de Chile situó el epicentro a 24 kilómetros al noreste de Constitución y el hipocentro a una profundidad de 40,7 kilómetros.

Ayer se suspendieron las clases en la ciudad de Constitución, donde el sismo fue percibido con un intensidad de ocho grados de la escala internacional de Mercalli (que va de uno a doce), con el objeto de revisar el estado de las escuelas.

La onda sísmica del temblor del domingo se expandió desde la región de Coquimbo, a 500 kilómetros al norte de Santiago, hasta Los Lagos, a 1.000 kilómetros al sur de la capital de Chile, según los últimos datos de la Onemi.