Los resultados provisionales de la autopsia de Chukri Ghanem, antiguo primer ministro libio y máximo responsable del Petróleo del régimen de Muamar el Gadafi, revelan que murió ahogado y no hay indicios de la participación de terceros o de un suicidio, según informó ayer en Viena un portavoz oficial.

Según la autopsia, Ghanem murió ahogado, resaltó ante la prensa Roman Hahslinger, portavoz de la Policía, al informar sobre los primeros resultados de la investigación iniciada después de que el cadáver del exministro libio, de 69 años, fuera hallado el domingo en las aguas del río Danubio a su paso por Viena.

"Hasta el momento no hay indicios de una responsabilidad de terceros", aseguró al tiempo que añadió que tampoco se ha encontrado alguna carta de despedida, o "algo parecido", que pudiera confirmar la tesis de un suicidio, ni informaciones de que el fallecido haya estado expuesto a "una amenaza aguda" para su seguridad.

No obstante, aún falta el resultado del examen toxicológico, que se obtendrá a finales de la semana y que puede ofrecer datos adicionales sobre la muerte del mandatario libio, quien también trabajó para la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), con sede en la capital austríaca.

La Policía tampoco ha encontrado datos de que Ghanem padeciese una enfermedad grave, y se ha desechado la posibilidad de que pudiese haber muerto a causa de un ataque al corazón.

El antiguo colaborador de Muamar el Gadafi vivía en una residencia de su propiedad en Viena, situada a pocos metros del lugar donde fue encontrado su cuerpo y cerca del complejo de Naciones Unidas.