Los países de la eurozona exigirán a España que resuelva definitivamente la crisis del sector financiero. A su vez, pedirán que expertos independientes valoren los activos inmobiliarios tóxicos que los bancos españoles tienen en sus balances por las dudas que existen sobre su valor real, así como un plan sobre el impacto que tendrá ese cálculo en las provisiones y la recapitalización de las entidades financieras.

La situación del sector financiero y de la economía española será uno de los puntos destacados en la agenda de los ministros de Finanzas de la eurozona que se reunirán el lunes.

El titular español de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, informará a sus homólogos de su estrategia para la banca y de las políticas fiscal y presupuestaria del Gobierno, sobre todo en lo que se refiere a las comunidades autónomas, dijeron ayer fuentes europeas.

Los ministros preguntarán a De Guindos "qué planes tiene para incrementar la transparencia en los balances de la banca española y qué va a hacer para garantizar que esa transparencia, especialmente en lo que se refiere a la valoración de los activos inmobiliarios, tenga consecuencias en las provisiones y las medidas de recapitalización, y qué planes tiene con Bankia", explicaron.

El Eurogrupo considera que la reestructuración de la banca española debe apoyarse en previsiones de la evolución de los precios de la vivienda durante los próximos años. Los socios comunitarios de España esperan, además, que De Guindos ratifique la estrategia española acerca de un "aumento muy considerable de los requisitos para las provisiones, especialmente con respecto a los activos vinculados al sector inmobiliario".