La incapacidad de los partidos políticos griegos para acordar la formación de un gobierno de coalición ha abocado al país, tras más de una semana de negociaciones, a la repetición de las elecciones en junio.

El último intento de lograr un compromiso fue liderado por el presidente de la República, Karolos Papulias, quien llegó a proponer un gobierno formado por tecnócratas para salir del punto muerto.

Sin embargo, esta propuesta tampoco fue aceptada por los partidos en una reunión extraordinaria celebrada ayer y a la que asistieron los líderes de todas las formaciones políticas, salvo los neonazis y los comunistas.

"El país va hacia nuevas elecciones bajo condiciones muy difíciles, porque algunos pusieron los intereses de su partido por encima del interés nacional", indicó Evangelos Venizelos, líder del socialdemócrata Pasok, tras la reunión de ayer.

Gobierno de transición

Según explicó la presidencia de la República, hoy serán convocados los líderes políticos a las 13.00 horas (10.00 GMT) para acordar un gobierno de transición -encabezado por un alto magistrado- que dirija al país a las elecciones.

Mientras tanto, Grecia debe hacer frente a una situación económica desastrosa, y en los próximos tres meses debe pagar 5.500 millones de euros en mantenimiento y vencimientos de deuda.

Además, ayer se supo que el PIB griego se hundió un 6,2% en el primer trimestre del año, lo que pone en duda las optimistas previsiones de la troika de que, con las medidas de austeridad, el país sería capaz de mantener la recesión por debajo del 5%. Según la emisora Real FM, la inestabilidad política ha motivado que unos 1.000 millones de euros hayan sido retirados de las cuentas bancarias griegas desde las elecciones del 6 de mayo.

Indignados españoles

Por otro lado, la policía griega procedió ayer a la detención de 16 personas del movimiento de los indignados que habían acampado durante la noche del lunes en la céntrica plaza de Syntagma de Atenas.

Entre los arrestados se encuentran cuatro españoles, uno de los cuales denunció haber sufrido contusiones durante el desalojo, según informaron fuentes de la Embajada española en Atenas. También fueron detenidos ciudadanos de Grecia, Italia, Suiza, Polonia, Francia y Bélgica.