Las tropas del Gobierno Federal de Transición de Somalia (GFT) liberaron hoy a los cuatro trabajadores humanitarios extranjeros de la ONG Norwegian Refugee Council (NRC) secuestrados el pasado viernes en el campamento keniano de refugiados de Dadaab, en el este del país.

El portavoz militar del GFT en la región de Bajo Juba (sur), Adan Hirsi, dijo hoy por teléfono que las tropas somalíes liberaron a los secuestrados en las primeras horas de hoy tras enfrentamientos con los captores, tres de los cuales perdieron la vida, mientras que otros tres fueron capturados, uno de ellos herido.

"Estábamos realizando operaciones de seguridad alrededor de la ciudad de Afmadow (sur de Somalia) cuando algunos de nuestros hombres vieron a los secuestradores en un coche al lado de un camino y vieron que había personas blancas", explicó Hirsi.

"Los raptores dispararon, pero nuestros soldados respondieron y, tras un enfrentamiento, rescataron a los cooperantes", agregó el portavoz gubernamental.

Según su versión, los rescatados son dos hombres y dos mujeres con nacionalidad noruega, canadiense, filipina y pakistaní, y se encuentran en buen estado.

Hirsi precisó que los trabajadores humanitarios del NRC liberados permanecen en el distrito de Dobley, cercano a la frontera con Kenia, mientras que un oficial del Gobierno que solicitó el anonimato apuntó que habían sido entregados a las autoridades locales.

Por su parte, el NRC se mostró "aliviado y contento de confirmar" que los cuatro compañeros secuestrados "han sido encontrados y liberados", a través de un breve comunicado colgado en su página web.

"¡¡¡Los rehenes han sido liberados!!!", celebró, también sin precisar más información, el portavoz del Ejército keniano, Emmanuel Chirchir, en su cuenta en Twitter.

En otro mensaje distinto, Chirchir afirmó que "los intentos de secuestro de (la milicia fundamentalista islámica somalí) Al Shabab han fracasado".

El pasado 29 de junio, individuos armados secuestraron en Dadaab un vehículo de la ONG Norwegian Refugee Council, en el que viajaban los cuatro cooperantes rescatados hoy.

El asalto al vehículo dejó dos heridos, uno de los cuales -el conductor, de nacionalidad keniana- sucumbió a las graves heridas del ataque y perdió la vida en un centro hospitalario de la zona, tras ser abandonado por los secuestradores.

El suceso se produjo en el campamento de Ifo II (en Dadaab), el mismo en el que tuvo lugar, el pasado mes de octubre, el secuestro de las cooperantes españolas de Médicos Sin Fronteras Blanca Thiebaut y Montserrat Serra, que siguen en cautiverio en Somalia.

El Ejército de Kenia entró en Somalia dos días después del secuestro de las cooperantes españolas, el cuarto que se producía en poco más de un mes, todos ellos supuestamente obra de Al Shabab, según las autoridades kenianas.

Desde entonces, Kenia ha sufrido varios ataques en Nairobi y en la segunda ciudad del país, Mombasa (sureste), y también en el norte y el este del territorio, que han dejado alrededor de una treintena de muertos y varias decenas de heridos -el último de ellos, ayer-, y que son presuntamente obra de Al Shabab.

Los fundamentalistas islámicos, que han amenazado varias veces con atacar a la población de Kenia como represalia por la invasión del territorio somalí, anunciaron el pasado mes de febrero su unión formal con la red terrorista Al Qaeda.

La milicia radical combate desde 2006 al Gobierno Federal de Transición somalí y a las fuerzas multinacionales de la Misión de la Unión Africana en Somalia (AMISOM) para instaurar un Estado musulmán de corte wahabí en el país.

Somalia vive en un estado de guerra civil y caos desde 1991, cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barré, lo que dejó al país sin un gobierno medianamente efectivo y en manos de milicias islamistas, señores de la guerra que responden a los intereses de un clan determinado y bandas de delincuentes armados.