Más de medio millón de hogares y negocios en el área metropolitana de Washington y los estados de Virginia y Maryland permanecen hoy sin energía eléctrica tres días después de una tormenta que ocasionó la muerte de al menos 17 personas.

El Gobierno Federal y los gobiernos locales han suspendido actividades, han autorizado un día de licencia para parte del personal y han intensificado sus esfuerzos para limpiar las calles y reparar los daños.

Los gobiernos de Maryland, Virginia y el Distrito de Columbia han declarado estado de emergencia desde que la tempestad, el viernes por la noche, derribara árboles y postes de la red de electricidad, causara inundaciones en algunas áreas y daños en miles de edificios.

También estados más al sur, como Carolina del Norte, o al norte, como el de Nueva Jersey, han sufrido el embate de las fuertes tormentas repentinas de este fin de semana, que elevan el número de personas sin electricidad a los 2 millones, en una semana especialmente calurosa, que eleva el riesgo en niños, enfermos o ancianos.

Según el recuento de la cadena CBS hasta el momento hay 17 muertos y un desaparecido por la tormenta. El mayor número de víctimas se registró en el estado de Virginia, con seis fallecidos, seguido de tres muertos en Carolina del Norte y dos muertos en Maryland, donde también hay un desaparecido.

Se espera que los cortes eléctricos se prolonguen aún durante varios días, después de que el viernes por la noche gran parte de Washington DC y alrededores quedasen sumidos en la oscuridad y el caos, algo que ha elevado las críticas de algunos funcionarios locales contra las empresas eléctricas.

Las autoridades de salud han reiterado hoy sus advertencias para que la población se proteja del calor, mientras que el parón en la capital estadounidense y sus alrededores se da poco antes de las multitudinarias celebraciones de la independencia el 4 de julio.

En el norte de Virginia permanecían apagados al menos un centenar de semáforos, y la Administración Estatal de Autopistas de Maryland recomendó que las personas que deban viajar en automóvil tomen al menos una hora de tiempo adicional debido a las congestiones del tránsito.

La empresa Baltimore Gas and Electric, que sirve al sur de Maryland, ha traído casi 900 operarios desde sitios tan lejanos como Florida, Misisipi, Michigan, Massachusetts, Tennessee, Pensilvania y Canadá para reparar sus redes de cables y transformadores.

Pepco, la empresa que proporciona electricidad en el norte de Virginia ha traído operarios desde Oklahoma, Florida, Georgia y Misuri, y esta mañana procuraba reclutar más personal en el nordeste y Canadá.

En Virginia, la ciudad de Alexandria suspendió para hoy todas las actividades en las escuelas públicas, y los gobiernos de esa ciudad, la ciudad de Falls Church y el Condado Loudon han permitido que los empleados que tengan dificultades para trasladarse tomen un día libre o trabajen desde sus casas.

Han cerrado sus actividades en ese estado también varias universidades, escuelas privadas y empresas.

Un panorama similar se vive en el sur de Maryland y el Distrito de Columbia.