La eurozona entregará a España la ayuda europea de hasta 100.000 millones de euros en cuatro tramos y hasta 25.000 millones se destinarán a financiar los bancos malos que se crearán para aislar activos inmobiliarios.

Estos nuevos detalles de la ayuda a la banca española los reveló el Gobierno holandés. Del documento se desprende que el pago se realizará en cuatro tramos, una vez se haya completado el análisis de las carteras crediticias de la banca y las pruebas de resistencia que arrojarán la cifra de las necesidades de capital de las entidades.

El primer tramo ascenderá a 30.000 millones de euros en bonos del FEEF, que estarán disponibles a finales de mes. La utilización de cualquier cantidad del primer tramo, antes de que la CE adopte los planes de reestructuración bancaria, requerirá una petición del Banco de España y aprobación expresa del Ejecutivo comunitario, junto al Banco Central Europeo y al Grupo de Trabajo del Euro.

El segundo tramo, por tanto, podrá ascender hasta a 45.000 millones (20.000 que se volcarían del primer tramo si no se usan y hasta 25.000 más ya previstos), que se entregará al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) a mediados de noviembre.

El tercer tramo, de 15.000 millones y que se desembolsará a finales de diciembre, se empleará para sanear entidades viables o dar salida a las que no lo sean dentro del grupo de las que no han sido intervenidas , así como para las que intenten recapitalizarse por sus propios medios.

El cuarto tramo también podrá llegar hasta los 15.000 millones y se centrará en socorrer a aquellas entidades que finalmente no lograron financiarse por sí mismas en los mercados.

Por último, se prevé consagrar hasta 25.000 millones adicionales a la financiación de sociedades de gestión de activos, es decir, los bancos malos que tendrán que crear las entidades que requieran ayuda pública hasta noviembre para aislar los activos problemáticos.