Dos hombres y dos mujeres aparecieron el miércoles muertos en una zona boscosa de Chevaline, en el lago de Annecy, mientras que una niña fue hallada herida de gravedad y otra, de 4 años, escondida en el vehículo escenario de los hechos.

Uno de los fallecidos es un ciclista que se hallaba en el exterior del automóvil, vecino de la zona, igual que la menor herida.

Según diversos medios, los disparos son de un arma automática de gran calibre.

Los primeros elementos de la investigación, divulgados por el vespertino "Le Monde", revelan que se trata de una pareja, sus dos hijas y la abuela, que se encontraban de turismo en el cercano cámping de Saint-Jorioz.

En un primer momento, los investigadores encontraron a cuatro miembros de la familia.

Fue en una revisión posterior del vehículo cuando, ocho horas después, fue hallada la menor, escondida entre maletas y las piernas de las dos mujeres fallecidas en la parte trasera del vehículo.

El fiscal justificó que la niña que resultó ilesa no fuera encontrada antes porque no se movió, se hizo la muerta y estaba entre maletas y las piernas de las dos mujeres asesinadas.

Por ello, solo fue encontrada cuando en la medianoche del miércoles llegó al lugar de los hechos la policía científica desde París.

La niña, que está bajo un gran choque emocional fue trasladada a un centro sanitario y ha comenzado a hablar con los investigadores.