Más de un millar de personas se manifestaron ayer en Tokio para reclamar la soberanía de Japón sobre las islas Senkaku/Diaoyu y lanzar proclamas contra China, en medio de la tensión existente entre ambos países por la disputa territorial en torno a este pequeño archipiélago.

Con pancartas contra Pekín y cientos de banderas japonesas, los manifestantes marcharon por varias de las principales avenidas del sur de Tokio, una zona financiera que acoge numerosas embajadas, entre ellas la de China.

Algunos portaban mapas que mostraban las islas Senkaku (conocidas como Diaoyu por Pekín) como parte del territorio japonés, o carteles que pedían "apoyo para la democracia en China" e incluso algunos que advertían de la supuesta intención china de invadir la región meridional nipona de Okinawa.