Seis soldados libios fueron asesinados ayer por desconocidos en la periferia de la ciudad oriental de Bengasi, donde también parece haber sido secuestrado un coronel del Ejército, según informó una fuente de los servicios de seguridad.

Los cadáveres de los soldados estaban atados de pies y manos y mostraban impactos de bala en la cabeza, añadió la fuente, que indicó que el coronel podía encontrarse con ellos en el momento en que fue secuestrado.

Este incidente se produce al día siguiente del asalto por miles de manifestantes a los cuarteles que tienen instalados en Bengasi varias milicias, como la radical islámica Ansar Al Sharia, de la que exigen su disolución, así como que sean reemplazadas por el ejército regular libio.

En dichos incidentes murieron al menos cuatro personas y otras treinta resultaron heridas a consecuencia del tiroteo que se produjo en el momento del asalto.

Como reacción a estos incidentes, el presidente del parlamento libio, Mohamed El Meguerif, expresó su apoyo a las reivindicaciones de los manifestantes de Bengasi pero advirtió de que si la situación se sale de control, podría ser aprovechada por "los enemigos de la nación" para intentar sacar partido.

En otro contexto, al menos 30 personas resultaron heridas ayer durante las protestas que han tenido lugar en la capital de Bangladesh, Dacca, en repulsa al vídeo que denigra la figura de Mahoma, según informaron varios medios de comunicación locales.

En esa misma línea, miles de personas se manifestaron en las calles de la ciudad de Bint Jbeil, en el sur del Líbano.

Por otro lado, la Policía francesa detuvo ayer en la localidad oriental gala de La Rochelle a un hombre, de 40 años de edad, que supuestamente había publicado en una web islamista un llamamiento para decapitar al director de la revista satírica francesa "Charlie Hebdo" a causa de la publicación de unas caricaturas sobre el profeta Mahoma.