El ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, aprobó ayer una petición especial del Ejército de ampliar el alistamiento de reservistas por encima de los 30.000 a los que dio luz verde el jueves, tras la caída de cohetes cerca de Jerusalén y Tel Aviv, informó una portavoz de ese departamento.

Israel inició ayer el alistamiento de los primeros 16.000 reservistas a la espera de ver cómo se desarrolla el conflicto con las milicias de Gaza, pero el agravamiento de los bombardeos mutuos en las últimas horas convencieron al Ejército de pedir una cuota mayor.

"Hoy, Barak autorizó al Ejército a ampliar la cuota de reservistas más allá de la cifra originalmente definida", dijo a través de un comunicado del ministerio de Defensa, que especificó que la decisión debe aún ser aprobada por el Gobierno del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.

Los nueve ministros más destacados del Ejecutivo se reunieron anoche en Tel Aviv y se prevé que den su visto bueno a la medida.

El Ejército presentó el citado plan tras valorar que no será suficiente con los bombardeos aéreos para "imponer" al movimiento islamista palestino Hamás un alto el fuego duradero, según el comentarista militar del Canal 10 de la televisión israelí, Alón Ben David.

Hasta ahora ningún soldado israelí ha cruzado oficialmente al territorio de Gaza, pero son miles, apoyados por unidades blindadas, los que van tomando posiciones en toda la zona fronteriza.

De salir adelante la operación terrestre, la Brigada de Infantería Guivati y la de Paracaidistas llevarán el peso de la invasión junto a una brigada blindada que ya se encuentra en la zona. Tras ellos, las unidades de reservistas se encargarán del control de las zonas que vayan siendo tomadas.

Mientras tanto, la Policía israelí dispersó ayer por la fuerza una manifestación de cerca de 200 palestinos que se concentraron en Jerusalén este para protestar contra la nueva ofensiva del Ejército de Israel contra Gaza.

Cientos de agentes de la Policía israelí a caballo y a pie cargaron y se enfrentaron con los manifestantes junto a la puerta de Damasco poco después del rezo comunitario que los musulmanes practican los viernes.

Durante el enfrentamiento no se registraron heridos y fueron arrestados "cinco árabe-israelíes (palestinos de ciudadanía israelí)", informó a Efe Micky Rosenfeld, portavoz de la Policía de Israel.

"Hubo una marcha no autorizada y fue disuelta rápidamente", agregó. Después, las fuerzas de la Unidad Antidisturbios y de la Policía de Fronteras se retiraron del lugar, como también los manifestantes, que expresaban con la marcha su condena a la ofensiva militar israelí en la franja.

Al menos 22 palestinos, más de la mitad de ellos civiles, han muerto y más de 250 resultaron heridos desde que el pasado miércoles comenzara la ofensiva "Pilar defensivo", durante la que la Fuerza Aérea israelí realizó ya más de 250 bombardeos sobre la franja.

Calma y contención

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, viajará "pronto" a Oriente Medio anunció ayer su portavoz. El portavoz de la ONU, Martin Nesirky, no precisó las fechas del viaje ni los lugares que visitará Ban, y dijo que entretanto continúa los contactos con líderes internacionales y regionales para pedir calma y contención, un objetivo común desde el pasado miércoles.

Por otra parte, el presidente palestino, Mahmud Abás, aseguró ayer en Ramala que la ofensiva israelí en Gaza no frenará la votación para conseguir el estatus para Palestina como Estado no miembro en la Asamblea General de la ONU el próximo día 29.

"Insistimos en ir a Naciones Unidas sean cuales sean las circunstancias", dijo en una declaración televisada al inicio de una reunión de urgencia del liderazgo palestino.

Abás afirmó que "todo lo que Israel está haciendo tiene como objetivo bloquear nuestro empeño en ir a Naciones Unidas", en referencia a la operación "Pilar Defensivo", lanzada el miércoles y en la que han muerto hasta el momento 22 palestinos.