Al menos 6 personas murieron y otras 24 resultaron heridas hoy en un ataque de supuestos miembros del grupo musulmán rebelde Frente Moro de Liberación Nacional (FMLN) en el sur de Filipinas, informó la prensa local.

Según un comunicado de la alcaldesa de Zamboanga, Maria Isabelle "Beng" Climaco, entre los 6 fallecidos se encuentra un policía, un miembro de la Fuerza Naval y cuatro civiles, según el diario "Rappler".

El portavoz de las Fuerzas Armadas de Filipinas, Domingo Tutaan, informó en una rueda de prensa televisada que otras 20 o 30 personas fueron secuestradas y utilizadas como "escudos humanos" por los guerrilleros.

Tutaan precisó que los otros 200 civiles que se creía habían sido secuestrados están simplemente atrapados entre dos frentes en la zona de Santa Catalina y que "no se atrevían a moverse por miedo a ser el blanco de algún disparo".

El portavoz subrayó que "están atrapados, pero no están secuestrados por los rebeldes".

Por su parte, el Gobierno de Zamboanga, donde el ataque comenzó de madrugada, afirmó que en total unas 1.450 personas de la localidad han buscado refugio en un colegio y en un hospital de la zona.

El negociador gubernamental ya se encuentra en la zona y ha contactado con los insurgentes para lograr la liberación del personal civil.

La crisis comenzó de madrugada cuando unos 400 miembros del Frente Moro de Liberación Nacional lanzaron un ataque contra siete poblaciones y una comisaría policial aledañas a la ciudad de Zamboanga, en la convulsa isla de Mindanao.

Tropas de refuerzo militares y policiales han sido desplegadas en el barrio de Rio Hondo, donde las autoridades apuntan que se encuentran los secuestradores.

El FMLN aceptó negociar una solución que no fuese la independencia y en 1996 firmó la paz con el Gobierno.

Varios miembros del grupo disconformes con las negociaciones decidieron por entonces fundar el Frente Moro de Liberación Islámica (FMLI), la mayor organización separatista de Filipinas que cuenta con unos 12.000 militantes.

Según analistas locales citados por el portal de noticias "Rappler", Nur Misuari, fundador del FMLN, "está haciendo ruido" por el supuesto fracaso del acuerdo de paz firmado en 1996 con el entonces presidente, Fidel Ramos.

Con esta acción, Misuari pretende boicotear las nuevas rondas de conversaciones entre el Gobierno filipino de Benigno Aquino y el FMLI, que se encuentran en las últimas rondas de la negociación de la paz, según los expertos.

El propio Frente Moro de Liberación Islámica ha pedido en un comunicado al Frente Moro de Liberación Nacional que "tome el camino de la paz" tras el asalto lanzado por sus militantes en Zamboanga.