El presidente del Gobierno italiano, Enrico Letta, pidió hoy "compromisos concretos" sobre inmigración en el próximo Consejo Europeo que se celebrará en Bruselas el 24 y 25 de octubre, a raíz de los últimos naufragios con más de 400 inmigrantes muertos en el Canal de Sicilia.

"No aceptaremos compromisos a la baja", advirtió Letta durante su intervención ante la Cámara de los Diputados, como suele hacer antes de una cumbre europea.

Sobre las peticiones que Italia llevará al Consejo Europeo, Letta adelantó que se exigirán "medidas inmediatas para actuar un programa de vigilancia Eurosur, reforzar Frontex, un plan de acción para la gestión de la emergencia migratoria, y el diálogo con los países del Mediterráneo".

Letta agregó que hasta ahora se ha definido a Europa como "sin alma", por lo que "se espera que el próximo Consejo sea una ocasión para hablar de una Europa diferente".

"Lo que está ocurriendo en el Mediterráneo no admite dudas o demoras. Llevaremos al Consejo el testimonio directo y alarmante de lo que está sucediendo y que nadie piense que estas tragedias terminarán con la llegada del mal tiempo", agregó.

Para Letta, el problema "Lampedusa" -frente a sus costas el 3 de octubre murieron 364 inmigrantes al incendiarse y hundirse el pesquero en el que viajaban- "es un problema europeo y Europa tiene que hacer más en espíritu del artículo 80 del Tratado (que regula temas de asilo)".

"La Unión Europea tiene la palabra solidaridad escrita en los tratados, pero después no logra ejercitarla cuando un país pasa por dificultades", agregó Letta.

El primer ministro italiano también consideró que las políticas comunes en materia de asilo e inmigración no son adecuadas y que "mejorarlas es un imperativo central y urgente".