Al menos 847 personas, entre ellas quince menores, han muerto en centros de detención gubernamentales en Siria desde comienzos de este año, denunció hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

La ONG apuntó que entre los fallecidos hay también al menos seis mujeres que han perdido la vida en prisiones del régimen.

Las víctimas han perecido bien por las torturas o ejecuciones, así como por las precarias condiciones sanitarias y humanitarias de su cautiverio o la negación de medicinas si estaban enfermas.

El Observatorio destacó que esas bajas se produjeron en cárceles del régimen, dependencias de los cuerpos de seguridad y en cuarteles militares.

Para elaborar este saldo, el grupo, con sede en el Reino Unido, se ha respaldado en la información proporcionada por los familiares de las víctimas, que han reportado sus casos.

La ONG no descartó que el número de muertos pueda ser superior porque hay más de 18.000 personas en paradero desconocido tras su arresto.

Más de 150.000 personas han perdido la vida desde el inicio del conflicto en Siria en marzo de 2011, según el Observatorio.