Los líderes del G7 condenaron de nuevo las acciones de Rusia en el este de Ucrania y advirtieron a Moscú de posibles nuevas sanciones si no ceja en su empeño de "desestabilizar" a su país vecino.

"Rusia todavía tiene la oportunidad de elegir el camino de rebajar la tensión, lo que llevaría a la eliminación de estas sanciones. Si no lo hace, sin embargo, seguimos dispuestos a intensificar aún más los costes de sus acciones adversas", afirmaron las potencias en un comunicado conjunto.

Los líderes de Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos, más la presidencia de la Unión Europea (UE), condenaron una vez más la anexión ilegal de la península de Crimea en Rusia, "y las acciones para desestabilizar el este de Ucrania", tomadas desde Moscú.

"Esas acciones son inaceptables y violan el derecho internacional", reiteraron los mandatarios, un día después de que tanto la UE como Estados Unidos aumentaran la presión sobre Rusia imponiendo nuevas rondas de sanciones sobre sus sectores financiero, energético y de defensa.

Asimismo, el G7 reiteró su condena al derribo del vuelo de Malaysian Airlines y exigió "una investigación internacional inmediata, exhaustiva y sin trabas".