Argentina pidió información a la Comisión del Mercado de Valores estadounidense (SEC) sobre las operaciones de bonos de deuda argentina para detectar posibles maniobras especulativas, informó hoy el titular del ente regulador bursátil argentino, Alejandro Vanoli.

En rueda de prensa, Vanoli, titular de la Comisión Nacional de Valores (CNV) argentina, señaló que la investigación fue solicitada al detectar que, "en base a rumores que se han lanzado, ha habido una gran variabilidad" en el mercado de bonos.

Según él, la petición fue cursada a raíz de la denuncia del Ministerio de Economía argentino por el supuesto interés de algunos de los fondos especulativos litigantes en Estados Unidos contra el Gobierno de Argentina de activar los seguros por impago.

Vanoli afirmó que el fondo NML Capital, uno de los que obtuvieron un fallo favorable en tribunales estadounidenses para su reclamación del cobro íntegro de títulos de deuda argentina, votó afirmativamente el pasado viernes para la activación de los seguros por impago de Argentina por un monto de unos 1.000 millones de dólares.

A su juicio, el fondo, encabezado por el millonario estadounidense Paul Singer, tuvo una actitud "reñida con la transparencia y la ética" y agregó que "ameritan ser investigados quienes buscan provocar un default (suspensión de pagos) absolutamente trucho (falso) que no está basado en ninguna razón legal, ética ni financiera".

En línea con afirmaciones previas del jefe de Gabinete de Gobierno argentino, Jorge Capitanich, Vanoli afirmó que quieren investigar posibles maniobras de los denominados fondos buitre para "beneficiarse por una doble vía", el cobro de seguros de impago y también por una sentencia judicial que calificó como "absurda" e "ilegal".

"El mercado ya votó y no hay default (suspensión de pagos)", subrayó el titular de la CNV, al señalar "que cada vez que en la Argentina hubo percepción de insolvencia la economía se descontrolaba", mientras que hoy la Bolsa "opera normalmente".

Además, Vanoli dijo que del organismo regulador bursátil de Francia ha recibido información sobre una sanción de 16 millones de euros impuesta al fondo NML Elliot por el uso de información privilegiada.

Esa sanción demuestra, según su parecer, que el caso argentino "no es aislado", sino "una práctica depredadora en todos los países".

El uso de información privilegiada y la manipulación del mercado son considerados delitos tanto en Argentina como en Estados Unidos.

En otro de los frentes abiertos por el Gobierno de la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, en el litigio con los fondos buitre, Capitanich reiteró hoy que solicitarán por escrito al juez estadounidense Thomas Griesa que cambie al mediador, Daniel Pollack.

Capitanich descalificó a Pollack al considerarlo "un vocero (portavoz) de los fondos buitre" y pidió que sea sustituido por un mediador imparcial.

En la última audiencia celebrada en Nueva York por Griesa, el pasado viernes, el juez descartó reemplazar a Pollack y pidió que se mantengan las negociaciones pese a haber vencido el plazo que tenía el Ejecutivo de Fernández para pagar a sus acreedores.

Argentina rechaza cumplir el fallo firme de Griesa, que ordenó pagar unos 1.500 millones de dólares a los fondos especulativos, al alegar que daría a pie a un aluvión de demandas de tenedores de bonos que aceptaron reestructurar su deuda en 2005 y 2010 con importantes quitas.

Aunque Capitanich ha insinuado que el país suramericano podría recurrir al Tribunal de La Haya, el exfiscal en la Corte Penal Internacional Luis Moreno Ocampo señaló hoy que no hay posibilidades de que esa vía judicial prospere.

Agencias calificadoras de riesgo internacionales han declarado al país en cese de pagos, pero el Gobierno argentino niega la situación de impago, sostiene que ha cumplido sus obligaciones financieras y responsabiliza a la Justicia estadounidense de congelar los fondos destinados a los acreedores de deuda reestructurada (92,4 % del total).