El grupo yihadista Estado Islámico (EI) ha ejecutado a un joven y después lo ha crucificado por fotografiar los cuarteles de esta organización en el pueblo de Al Bab, en el este de la provincia de Alepo, en el norte de Siria, informó ayer el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

El fallecido fue ejecutado el viernes en la rotonda de Al Manshie en Al Bab, donde su cadáver fue crucificado después por los radicales, que ordenaron que permanezca así durante tres días para que sirva de castigo ejemplar para otros ciudadanos.

Al Bab es uno de los feudos principales del EI en la provincia de Alepo, cuya periferia oriental está en manos de los extremistas.

El EI proclamó un califato en Irak y Siria a finales de junio, donde ha conquistado amplias partes del territorio.

La organización es conocida por sus prácticas brutales, ya que ha asesinado, secuestrado y decapitado a algunos de sus prisioneros y rehenes.

El 23 de septiembre, la coalición internacional, liderada por EEUU, inició los bombardeos contra posiciones del EI en ambos países.

Por otro lado, al menos ocho combatientes del Estado Islámico (EI) murieron ayer en una emboscada tendida en la ciudad kurdo siria de Kobani por milicianos kurdos, que se apoderaron del edificio de la radio.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) informó en un comunicado de que ese ataque de las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo contra los yihadistas se registró cerca del ayuntamiento.

La misma milicia kurda logró además tomar el control del edificio de la radio y sus alrededores.