Un sargento de las Fuerzas Armadas de Turquía resultó hoy herido de gravedad en el sureste del país eurasiático cuando unos desconocidos le dispararon en la cabeza, informó la emisora CNNTürk.
El suboficial estaba de compras, junto a su mujer, en un mercado en el centro de la ciudad de Diyarbakir, considerada como la "capital" del Kurdistán turco, cuando se le acercaron dos enmascarados y le dispararon.
Este intento de asesinato guarda gran similitud con el ocurrido el sábado pasado en el municipio de Yüksekova, también en el sureste de Turquía, en el que murieron tres gendarmes.
El Estado Mayor del ejército turco aseguró hoy en una nota que los responsables del ataque de Yüksekova son dos miembros del Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda.
El proceso de paz entre el PKK y el Gobierno, iniciado hace casi dos años, está al borde de la ruptura desde que el asedio del grupo yihadista Estado Islámico (EI) a la ciudad sirio-kurda de Kobani ha evidenciado las profundas diferencias entre Ankara y los movimientos kurdos.
Con los bombardeos contra posiciones del PKK y la muerte de tres guerrilleros kurdos en un ataque el jueves pasado, así como los asesinatos de los tres militares y un miliciano progubernamental durante el fin de semana, el alto el fuego en vigor desde marzo de 2013 parece haberse volatilizado.
El partido HDP, la principal fuerza política de los kurdos en Turquía, condenó el incidente de hoy diciendo que "este tipo de ataques son totalmente inaceptables".
Hizo un llamamiento público a hacer lo necesario para continuar con el proceso de paz y evitar nuevos combates.
Pero esta paz está frágil, con cada vez más incidentes como uno que ocurrió ayer en Sirnak, en el sureste, donde una patrulla se vio envuelta en un tiroteo en un incidente que un comunicado de la oficina del gobernador atribuye al PKK.
Poco después falleció en el hospital de la ciudad una persona ingresada con heridas de armas de fuego y que las autoridades identificaron como miembro de la guerrilla, según CNNTürk.
El PKK, considerado un grupo terrorista por Turquía y la Unión Europea (UE), inició su actividad armada en 1984 a favor de más derechos para los alrededor de 12 millones de kurdos en Turquía.
Desde entonces han muerto más de 45.000 personas en atentados y enfrentamientos entre guerrilleros y las fuerzas de seguridad turcas.