El ejército argelino confirmó hoy que ha dado muerte a Abdelmalek al Guri, "emir" de Yund al Jilafa (Soldados del Califato), brazo del Estado Islámico (EI) en Argelia y autor del secuestro y decapitación del montañero francés Hervé Gourdel.

El Ministerio de Defensa Nacional confirmó, en un comunicado, que una operación militar realizada esta madrugada "permitió la eliminación de tres terroristas (y que) la identidad del peligroso criminal Abdelmalek Al Guri ha quedado confirmada".

La operación se llevó a cabo en la localidad de Issers, en la región de Bumerdes (al este de la capital), cuando Al Guri y dos de sus hombres se encontraban dentro de un vehículo.

En ese automóvil fueron encontrados dos fusiles, munición diversa, un cinturón explosivo y varios teléfonos celulares.

Además, el Ministerio explica que, en otra operación distinta, el Ejército mató a otros "dos peligrosos terroristas" en la región de Tizi Uzu, en la Cabilia argelina, uno de los feudos de los grupos yihadistas.

Al Guri, de 36 años, era uno de los terroristas más buscados en Argelia junto a su antiguo jefe Abdelmalek Drukdel, quien supuestamente sigue fiel a Al Qaeda y encabezando su "rama magrebo-sahaliana" con el nombre de Al Qaeda en el Magreb Islámico.

Al parecer, la relación entre Drukdel y Al Guri se rompió recientemente y en septiembre pasado se dio a conocer el grupo del segundo, con el secuestro y decapitación de Gourdel, cuyas imágenes fueron difundidas en internet.

Según Yund al Jilafa, la muerte del montañero fue un acto en venganza por la participación de Francia en la coalición internacional que lucha contra el EI en Irak.