Japón continúa hoy a la espera de noticias desde Jordania sobre la situación del periodista nipón y del piloto jordano secuestrados por Estado Islámico (EI), después de que se haya cumplido el plazo fijado por ese grupo yihadista para su ejecución si no se cumplían sus condiciones.

El grupo yihadista dio el jueves un nuevo ultimátum que ponía como límite "la puesta del sol, hora de Mosul" de ese de día para ejecutar a los rehenes si no se cumplían sus exigencias, un plazo que ya se ha rebasado sin que se conozca el devenir de los rehenes.

El EI amenazó con matar a japonés Kenji Goto y al piloto jordano Muaz Kasasbeh si no era liberada la terrorista iraquí Sayida al Rishawi, encarcelada en Jordania.

Las últimas horas se han vivido con tensión creciente en Japón, después de que el intercambio de prisioneros quedara aparentemente bloqueado debido a que el Gobierno de Ammán pidió al EI una prueba de vida del piloto jordano para cumplir su exigencia de liberar a la terrorista.

El Gobierno nipón mantiene, no obstante, su "plena confianza" en la gestión de la situación por parte de Jordania, dijo hoy el ministro portavoz Yoshihide Suga en rueda de prensa.

El portavoz no quiso hacer más comentarios sobre en qué punto se encuentran dichas negociaciones ni sobre el estado de los rehenes.

Asimismo, mostró su comprensión hacia el llamamiento realizado la víspera por la mujer del rehén nipón, en la que pedía más esfuerzos a Tokio y Ammán para salvar su vida.

"Entiendo que como esposa de (Kenji) Goto tuvo que hacerlo", dijo el portavoz en alusión al emotivo comunicado de la mujer, su primera declaración pública desde que su marido fue secuestrado a finales de octubre por los yihadistas.

"Creo que ésta es la última oportunidad para conseguir su liberación y la de Muaz Kasasbeh", afirmó la esposa del rehén japonés en un comunicado distribuido por la cadena británica BBC, en alusión al otro secuestrado por EI.

"Ruego al Gobierno jordano y al japonés que entiendan que los destinos de ambos hombres están en sus manos", señala Rinko Goto en su mensaje.

Por su parte, el padre del piloto jordano hizo un llamamiento el jueves en la misma línea, en el que pidió a la organización radical que libere a su hijo ya que comparte con ellos la "fe islámica".

"Os pido, con el todopoderoso Alá y su profeta, que liberéis a mi hijo y os aseguro que tal decisión será recibida con aprecio por parte de diez millones de hombres tribales en Jordania y Palestina", dijo Safi Kasasbeh en Ammán.