La Policía Federal de México detuvo a un expolicía de Iguala que supuestamente participó en el asesinato del estudiante Julio César Mondragón, quien fue encontrado muerto el 27 de septiembre del año pasado con la cara desollada, informaron hoy fuentes oficiales.

El detenido, Luis Francisco Martínez, habría participado también en el ataque al autobús en que viajaba el equipo de fútbol infantil Los Avispones, suceso por el que murió un niño, el conductor y la pasajera de un taxi que pasaba cerca.

Un total de seis personas fallecieron la noche del 26 de septiembre, las tres mencionadas y tres estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa. Mondragón fue hallado al día siguiente.

A través de un comunicado, la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) indicó que el 25 de febrero elementos de la Policía Federal cumplieron un mandamiento judicial contra Martínez, de 40 años y originario de la comunidad de Apipilulco, municipio de Cocula en el estado de Guerrero.

La detención se produjo en el mismo municipio de Iguala, donde 43 estudiantes de la Escuela de Ayotzinapa desaparecieron en los eventos del 26 de septiembre a manos de policías corruptos de la localidad.

Según la versión oficial, los jóvenes fueron entregados por los policías a miembros del cártel Guerreros Unidos, quienes los asesinaron e incineraron sus restos en un basurero de Cocula, una versión que los padres de las víctimas se resisten a creer.

De hecho, el esclarecimiento de la muerte de Mondragón es uno de los requisitos de los familiares, quienes hoy se manifiestan en la capital mexicana para exigir justicia y marcar los cinco meses de la tragedia.