La Justicia mauritana ha ordenado la detención de un ciudadano acusado de mantener en esclavitud a una familia de cinco personas en la región de Bir Mogrein, en el extremo norte del país, informó hoy a Efe una fuente judicial.

Según la fuente, Salek uld Amar fue acusado de "prácticas esclavistas" e ingresado en la cárcel de Zuerate, a unos 638 kilómetros al norte de Nuakchot, a la espera de que comparezca ante el juez de instrucción.

El hombre fue arrestado tras una denuncia presentada por Salma Mint Avreikine, una mujer que lo acusó de mantener en esclavitud a su familia: el marido llamado Buyemaa, dos hijos -Bilal y Ahmed- y una hija llamada M''barka.

Las investigaciones judiciales por esclavitud son muy raras en Mauritania, ya que las víctimas casi siempre se niegan a denunciar a sus amos, y las denuncias presentadas por organismos pro derechos humanos suelen ser desestimadas por los jueces.

El discurso oficial de Mauritania consiste en negar de forma categórica la existencia de esclavitud, aunque reconoce que persisten sus secuelas.

La esclavitud fue oficialmente abolida en 1980, pero las organizaciones de derechos humanos denuncian que la esta práctica persiste en algunas regiones del país.

Mauritania endureció las penas contra este fenómeno el 3 de septiembre de 2007 con la aprobación de una ley que penaliza la esclavitud.