El primer ministro de Italia, Matteo Renzi, pidió hoy a los países europeos "hacer frente juntos a la cuestión de la inmigración" y recordó que "Europa nació para derribar muros, no para construirlos".

En una rueda de prensa con el primer ministro de Luxemburgo, Xavier Bettel, actualmente el presidente de turno del Consejo de la Unión Europea (UE), Renzi opinó que los centros de identificación para los refugiados que Italia se ha comprometido a poner en marcha "son una parte de la solución, pero no ''la'' solución".

"Hay más soluciones. La identificación se debe hacer con criterios y personal europeo, pero también hay que tener en cuenta el tema de la repatriación y la distribución en el territorio", afirmó tras la reunión mantenida con Bettel.

Asimismo, Renzi declaró que "Italia estaba preparada para hacer su parte" y elogió la acción de Bettel, "un joven líder europeo que está haciendo una gran labor dentro de la Unión Europea".

El jefe del Gobierno italiano reiteró varias veces durante su discurso la necesidad de que Europa afronte unida la crisis migratoria que se está viviendo estos días, y que sea "un horizonte, una esperanza, y no un muro ni una frontera".

"Lo que a nosotros nos interesa es que Europa, unida, gestione el problema de la inmigración", concluyó.