Ucrania sacó hoy a varios periodistas, entre ellos dos españoles, de la lista negra de casi 400 personas a las que ayer vetó la entrada al país por un año, tras las críticas que levantó esa decisión.

Los dos periodistas españoles que han sido excluidos de la lista negra son Antonio Pampliega y Manuel Ángel Sastre, ambos actualmente desaparecidos en Siria, presuntamente secuestrados.

Otro español de la lista, el historiador y periodista Cesar Vidal, continúa sancionado por las autoridades ucranianas, por haber participado como observador en el referéndum organizado en Crimea por los separatistas prorrusos, y por sus declaraciones realizadas entonces.

En particular, el Consejo de Seguridad Nacional ucraniano achaca a Vidal haber dicho: "esta nación artificial, que se llama Ucrania, es utilizada como un arma para amenazar al Kremlin".

Tras la revisión de la lista negra difundida ayer por un decreto del presidente de Ucrania, Petró Peroshenko, también han sido excluidos hoy tres periodistas de la cadena pública británica BBC y un informador alemán.

El Consejo de Seguridad Nacional argumentó su decisión "por la gran resonancia social y la importancia estratégica de las relaciones con la Unión Europea".

Antes, el ministro de Política Informativa de Ucrania, Yuri Stets, había anunciado que se iba a revisar la lista de sancionados en lo referente a los periodistas.

"Los periodistas que cumplen con los estándares de la profesión no estarán en la lista", aseguró.

Poroshenko firmó ayer un decreto por el que se sancionó a 90 empresas y se prohibió la entrada por un año en Ucrania a cerca de 400 personas.

A los sancionados se les acusa de amenazar los intereses, la seguridad nacional y la integridad territorial de Ucrania.

Entre los periodistas sancionados rusos figuran varios de los principales medios, como las agencias Rossiya Sevodnia y Tass, así como la televisión RT.