Las fuerzas gubernamentales sirias lanzaron hoy una ofensiva terrestre en las afueras de Damasco con el objetivo de recuperar el control de dos zonas estratégicas desde donde los "terroristas" suelen lanzar proyectiles contra la capital, según informaron medios de comunicación oficiales.

Una fuente militar citada por la agencia de noticias estatal Sana explicó que unidades del Ejército iniciaron una operación en los distritos de Yobar y Harasta, en Guta Oriental, principal bastión opositor de la periferia de Damasco.

Según esa fuente, los soldados retomaron la sede de la Compañía de Agua Rima, así como varios edificios en Yobar, y eliminaron centros de comunicaciones y de operaciones de "los terroristas", como el régimen denomina tanto a la oposición moderada como a los yihadistas del Estado Islámico (EI) y otros grupos extremistas.

Desde dentro de Damasco, pudo constatar que a lo lejos se elevaban columnas de humo originadas por explosiones y los combates en el extrarradio.

La televisión siria, que emitió desde Guta, mostró imágenes de calles con socavones en el suelo por el impacto de cohetes y postes de la línea telefónica dañados.

Otra fuente militar, citada por los medios oficiales, afirmó que decenas de "terroristas y mercenarios takfiri" (musulmanes radicales), parapetados en Harasta y Yobar, murieron durante las operaciones castrenses, mientras que cientos se han escondido o han tratado de huir.

La fuente añadió que las Fuerzas Armadas están "resueltas a restaurar la seguridad y la estabilidad rápidamente" en ambas áreas, ubicadas en las afueras nororientales de la capital.

Tanto Harasta como Yobar han estado cercadas durante más de dos años y bajo el bombardeo constante del Ejército gubernamental.

Su importancia radica en su proximidad a Damasco y en que son punto de paso desde la capital a otras provincias del norte.

Por otro lado, el Ejército sirio, apoyado por la aviación rusa, irrumpió en los bastiones de grupos "terroristas" en Deraa (sur), Hama (centro), Latakia (noroeste) e Idleb (noroeste), donde mató a un gran número de sus detractores.

Fuentes castrenses aseguraron que decenas de "terroristas del llamado Ejército de Al Fatah" fallecieron en un ataque de los militares cerca del monte Sidi Ali, en el área de Jan Shijún, en Idleb.

Además, siete militantes del grupo Ahrar al Sham fueron abatidos por los efectivos gubernamentales en Al Hula, en el norte de la provincia de Homs.

Mientras, en la provincia nororiental de Deir al Zur, las tropas sirias han protagonizado fuertes choques con el grupo terrorista Estado Islámico en las últimas veinticuatro horas.

Una fuente militar dijo a medios oficiales que unos cien terroristas del EI han muerto o resultado heridos en esos combates.

Las Fuerzas Armadas anunciaron el jueves el lanzamiento de una ofensiva a gran escala contra los "terroristas" en el país, que hasta ahora se había centrado en las provincias de Hama e Idleb.

En esta ofensiva, el Ejército cuenta con el respaldo de la aviación rusa, que comenzó los ataques aéreos en Siria el pasado 30 de septiembre.