Unos 3.500 militares y 200 policías federales y estatales participan en el Operativo Chilapa, que hoy se inició con el objetivo de reducir la violencia vinculada al crimen organizado en varios municipios del estado mexicano de Guerrero, informaron las autoridades.

El Grupo de Coordinación Guerrero, conformado por agencias federales de seguridad y el Gobierno de Guerrero, informó de que la estrategia abarca los municipios de Chilapa, Zitlala, Cuilapan, Zototitlán y Ahuacuotzingo, de población mayoritariamente indígena, que han sido acosados por el crimen organizado los últimos tres años.

Todos esos municipios forman parte de la región de la Montaña Baja del Guerrero, donde las autoridades tienen identificados a los grupos criminales de "los Rojos" y "los Ardillos", a los que consideran responsables de numerosas desapariciones y asesinatos.

El operativo, que trata de frenar la violencia derivada de la pugna entre las dos bandas, fue puesto en marcha por el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo, y el general Alejandro Saavedra, comandante de la Novena Región Militar.

"Estoy convencido que con la ayuda del Gobierno federal, y lo que nosotros podamos contribuir en materia de seguridad, vamos a dar la gran batalla para que Guerrero salga adelante, porque a Guerrero le urge enfrentar su pobreza y sacudirse de la violencia", declaró Astudillo durante la ceremonia de inicio de la operación.

En las instalaciones de la Unidad Deportiva de Chilapa, el gobernador manifestó que los hechos criminales que se han suscitado en esta región, incluida la irrupción de civiles armados en mayo del año pasado que se hacían pasar por policías comunitarios, no deben presentarse jamás.

En la operación participan personal del Ejército Mexicano, la Marina, la Fuerza Aérea, la Procuraduría General de la República, la Policía Federal y la Policía Estatal.

La semana pasada el secretario mexicano de Gobernación, Miguel Ángel Osorio, visitó Chilapa y anunció la instalación de un cuartel militar en el municipio.

Guerrero, en el sur de México, es uno de los estados más violentos del país, con centenares de muertos desde la desaparición de 43 estudiantes de la escuela para maestros de Ayotzinapa en septiembre de 2014 en Iguala.