A más de cuatro días de los atentados en el aeropuerto de Zaventem de Bruselas y en la estación de metro Maalbeek, el aeródromo permanece cerrado, mientras que desde Europol se advIerte de que la red de yihadistas en Europa es "más grande" de lo que se temió "en un principio".

Así lo ha declarado el director de la agencia policial de la Unión Europea, Robert Wainwright, a la BBC, a la que ha reconocido que existe preocupación por una "comunidad de 5.000 sospechosos que se han radicalizado en Europa, han viajado a Siria e Irak para tener experiencia en conflictos". Algunos de ellos han vuelto desde entonces a Europa.

Mientras tanto, las fuerzas de seguridad belgas han dado por concluidas sus investigaciones del atentado perpetrado el pasado martes en el aeropuerto de Bruselas, pero las autoridades de las instalaciones han anunciado que todavía no admitirán vuelos ni mañana ni el próximo lunes dado que están preparando la incorporación de las nuevas medidas de seguridad dictadas por el Gobierno belga.

"El aeropuerto de Bruselas está estudiando, en estos momentos, una solución temporal para reanudar parcialmente los vuelos de pasajeros teniendo en cuenta las nuevas medidas que ha decidido el gobierno federal. No se espera que los vuelos se reanuden antes del martes, 29 de marzo", indican las autoridades aeroportuarias en un comunicado.

El lugar fue escenario de uno de los atentados en la capital europea del pasado martes que costaron la vida a 31 personas y dejaron heridas a más de 300. La primera identidad de una víctima fatal que fue confirmada fue la de la peruana Adelma Tapia Ruiz, de 37 años, quien estaba en el aeropuerto con su marido, belga, y sus hijas gemelas de 4 años (los tres sobrevivieron).

El hermano de la víctima, Fernando Tapia Coral, dijo en una entrevista que el marido se salvó porque salió con sus hijas del área de la explosión poco tiempo antes que ocurriera y luego no pudo encontrar a su esposa.

Entre las víctimas mortales se encuentra también una joven de nacionalidad española. Se trata de Jennifer García Scintu, de 29 años de edad, que vivía en Alemania junto a su marido, y que falleció en la explosión causada por el terrorista suicida Ibrahim Bakraoui en el aeropuerto de Zaventem, donde la joven iba a tomar un vuelo con destino a Nueva York.

En relación al atentado en el aeropuerto, las autoridades griegas han encontrado un mapa y varios dibujos del aeropuerto internacional de Bruselas, Zaventem, en un apartamento de Atenas en el que estuvo Abdelhamid Abaaoud, considerado el ''cerebro'' de los atentados de París. EVALUACIÓN DE LOS DAÑOS

Hoy, "más de cuatro días después de los ataques, las pesquisas de la investigación judicial en la terminal han concluido", según el aeropuerto, que el pasado viernes recibió por fin el permiso para que su equipo de ingenieros pudiera finalmente evaluar los daños causados por los atentados.

"El equipo examinará la estabilidad del edificio y comprobará el funcionamiento de los sistemas informáticos. Además, evaluará el daño material y determinará el proceso de remodelación de la terminal", según la nota.

Las autoridades advierten de que mantendrán, de momento, el perímetro de seguridad alrededor de la zona de la explosión, que permanecerá completamente cerrada al paso del personal no autorizado por las fuerzas de seguridad, que siguen realizando "intensos controles".

EN UNA LISTA DE TERRORISTAS DE EEUU.

Uno de los kamikazes de los ataques perpetrados el pasado martes en Bruselas, Ibrahim Bakraoui, estaba en una lista de vigilancia de antiterrorismo de Estados Unidos antes incluso de los ataques del 13 de noviembre en París, en los que murieron 130 personas, y su hermano, Jalid, fue incluido poco después, según han indicado fuentes cercanas al asunto.

La agencia de noticias ''Reuters'' había informado previamente de que ambos hermanos eran conocidos para las autoridades de Estados Unidos antes de la detención de Salah Abdeslam, el 18 de marzo, un francés al que la Fiscalía atribuye la autoría intelectual de los atentados de la capital francesa.

Los fiscales belgas han identificado a Bakraoui como uno de los dos kamikazes que atentaron contra el aeropuerto de Zaventem el martes, y a su hermano Jalid como el que perpetró el ataque contra el Metro en a estación de Maelbeek, muy cerca de la sede de la Unión Europea.