Al menos 11 personas han muerto y 36 han resultado heridas al estallar hoy un coche bomba al paso de un autobús policial en el centro histórico de Estambul, informó hoy el gobernador de la ciudad, Vasif Sahin.

"Siete policías y cuatro civiles han muerto, otras 36 personas han resultado heridas", declaró Sahin a los medios en una breve declaración.

El atentado se produjo a las 08.40 horas cuando el vehículo con los agentes circulaba cerca de una parada pública de autobuses en el barrio de Beyazit Vezneciler, cerca de una universidad y de lugares turísticos en la parte europea de la metrópoli.

Al parecer el coche bomba fue activado por control remoto y después de la explosión se produjo un tiroteo, según la agencia de noticias pública Anadolu, aunque existe cierta confusión sobre este extremo.

CNNTürk indica que numerosas ambulancias y coches policiales se desplazaron al lugar y han trasladado a los heridos a diferentes hospitales de la ciudad.

En el lugar se aprecian enormes daños, incluidos varios vehículos calcinados y el autobús policial parcialmente destruido.

Varios comercios en los alrededores han sido evacuados y los medios turcos indican que los artificieros pueden llevar a cabo alguna explosión controlado de vehículos sospechosos.

Turquía se encuentra en estado de alerta por amenaza terrorista y Estambul ha sido escenario este año de dos atentados suicidas atribuidos al grupo terrorista Estado Islámico en lugares turísticos y que causaron una quincena de muertos.

El pasado marzo un atentado suicida con coche bomba del grupo armado Halcones por la Libertad de Kurdistán (TAK, en sus siglas en kurdo) cerca de una parada de autobuses urbanos en Ankara causó 37 muertos y más de un centenar de heridos.

Este grupo reivindicó también un atentado en febrero contra un convoy militar en el centro de Ankara, cometido con un coche bomba conducido por un suicida que causó 28 muertos, en su gran mayoría militares.

El grupo armado se presenta como una escisión radical del Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda de Turquía, y se ha atribuido diversos ataques y atentados contra civiles desde 2004, si bien se sabe muy poco de sus estructuras o fines.

El Gobierno turco y numerosos analistas consideran el TAK simplemente una "marca subsidiaria" del PKK, utilizada para reivindicar atentados que podrían dar mala imagen a esta guerrilla, por ejemplo, si provocan la muerte de civiles.