El primer ministro de Bélgica, Charles Michel, hizo hoy un llamamiento a la unidad "frente a los actos de odio" después de que este domingo un solicitante de asilo muriera al detonar un artefacto explosivo y dejara al menos diez heridos en la localidad de Ansbach, al sur de Alemania.

"Las heridas tardarán en curarse, pero os pido a todos vosotros permanecer fuertes y unidos frente a estos actos de odio", escribió Michel en su perfil de la red social Twitter para condenar el ataque.

Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de Bélgica, Didier Reynders, también expresó su solidaridad con Alemania mediante un comunicado, indicó el diario ''Le Soir''.

"Baviera, de nuevo golpeada; quiero transmitir nuestra solidaridad y apoyo tanto a las víctimas como al pueblo alemán", declaró Reynders.

Un solicitante de asilo sirio de 27 años murió en la noche del domingo al detonar un artefacto explosivo, que hirió al menos a diez personas, en la localidad alemana de Ansbach, cerca de Nuremberg.

La policía investiga si se trata de un atentado islamista.