El prorruso Ígor Plotnitski, líder separatista de la región ucraniana de Lugansk, resultó hoy herido grave en un atentado con bomba, según informan las autoridades rebeldes.

"Plotnitski resultó herido esta mañana como resultado de una potente bomba que estalló cerca de su automóvil", señaló la fuente a medios locales.

Un portavoz del hospital donde el dirigente insurgente esta siendo tratado de las heridas recibidas aseguró que "su estado es grave".

"Está siendo operado", añadió.

La bomba, que estalló en el centro de la capital regional al paso del vehículo, también dejó heridos a dos acompañantes del separatista que viajaban en el vehículo y causó daños en las fachadas de los edificios colindantes.

Fuentes separatistas informaron a medios rusos que la principal versión del atentado apunta a un artefacto explosivo colocado por una unidad de sabotaje ucraniana.

Con todo, el representante de la autoproclamada república popular de Lugansk en las negociaciones de paz, Vladislav Deinego, aseguró que "ninguna provocación puede influir en el proceso de Minsk".

"No hay que caer en las provocaciones del enemigo. Continuaremos respetando los Acuerdos de Minsk. No estamos hablando de reanudar los combates por nuestra parte", señaló.

El este de Ucrania, donde rige teóricamente un alto el fuego desde la firma de los Acuerdos de Minsk de febrero de 2015, vive en las últimas semanas una escalada de tensión debido al incremento de las escaramuzas que han costado la vida tanto a milicianos rebeldes como a soldados ucranianos.

Precisamente, el líder de la autoproclamada república popular de Donetsk, Alexandr Zajárchenko, advirtió ayer que Kiev sigue apostando por una solución militar al conflicto, que se ha cobrado más de 10.000 vidas.

"Del otro lado de la línea del frente está todo preparado para una ofensiva", alertó.

Las negociaciones de paz están estancadas, entre otras cosas, por la falta de acuerdo sobre las elecciones en las zonas controladas por los separatistas, ya que Kiev exige garantías de seguridad y la presencia de observadores internacionales.

Además, Ucrania demanda el control de la frontera entre las regiones de Donetsk y Lugansk y territorio ruso, mientras Moscú pide a Kiev que apruebe antes una ley que otorgue un estatus especial a las zonas separatistas.