La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha afirmado este lunes que la malaria ha dejado de ser la principal causa de mortalidad infantil en África subsahariana, apuntando a los progresos en el control de la enfermedad en la región.

La directora regional de la OMS para África, Matshidiso Moeti, ha destacado que desde el año 2000 la tasa de muertes por malaria ha descendido un 66 por ciento, lo que supone más de seis millones de personas.

Las declaraciones de Moeti han llegado durante la reunión del Comité Regional para África de la OMS, que ha adoptado por unanimidad un nuevo acuerdo marco para luchar contra la enfermedad en el continente.

El acuerdo pretende coordinar la respuesta de los 47 estados miembro en la aplicación de la Estrategia Técnica Global contra la enfermedad, con el objetivo de lograr "una región africana libre de malaria".

A pesar de estos avances, la enfermedad sigue siendo un grave problema en el continente, con un total de 190 millones de casos en 2015, lo que representa un 89 por ciento del total mundial, y 400.000 muertes, el 91 por ciento del total mundial.

Por ello, la OMS ha destacado que, partiendo de una población total de 830 millones en riesgo de contraer la enfermedad, serán necesarios 66.000 millones de dólares (unos 58.254 millones de euros) para eliminarla de cara a 2030.